Cómplice de la gran borrachera
Cuatro menores acaban inconscientes en un 'botellón' - Detenido un hombre de 22 años que les dio el alcohol
Tenía que ser una gran tarde y acabó con una decena de menores tirados por el suelo en un parque de Montornès del Vallès (Vallès Oriental). Cuatro de ellos estaban inconscientes por los efectos del alcohol y dos niñas de 14 años acabaron en el hospital, ya que no respondieron a los primeros cuidados que les dispensaron los servicios de emergencias.
Todo sucedió el pasado 20 de marzo en el parque Manso Calders y la policía ha detenido a Pedro M. R., de 22 años. Él fue quien compró las bebidas y se las dio a los menores, que tienen prohibido comprarlas. Y él fue quien, también bastante bebido, se marchó del lugar sin prestar atención a que sus compañeros de borrachera necesitaban ayuda. La policía le acusa de un delito de omisión de socorro.
Pedro M. R. se fue del parque sin atender a los intoxicados
Pedro M. R. se dirigió la tarde del 20 de marzo a un centro comercial y se armó con varias botellas de ron, whisky y vodka antes de ir al parque, según la reconstrucción policial de los hechos. Allí compartió el alcohol con su grupo de amigos, entre los cuales había varios menores. Pero, a medida que las botellas se vaciaban, algunos empezaron a caer. Pedro M. R., según la policía local, se marchó desentendiéndose de la situación.
La fiesta alcohólica se acabó gracias a un vecino que paseaba su perro por el parque y, al encontrarse con la escena, llamó a la Policía Local. Los agentes se encontraron un panorama inquietante, con una alfombra de botellas vacías y una decena de jóvenes tirados por el suelo por diferentes zonas del parque. Un menor que fue testimonio del desfase asegura que había muchos más.
La policía llegó a identificar hasta a ocho menores de entre 14 y 16 años, cuatro de ellos inconscientes. Las dos chicas que no respondieron a las tareas de reanimación fueron trasladadas al Hospital de Granollers. Se les dio de alta a las pocas horas, cuando se pasó el efecto del alcohol.
El propio testimonio de los jóvenes llevó a la policía a la localización de Pedro M. R. como el comprador de las bebidas, hecho que corroboraron las imágenes de las cámaras del centro comercial. Finalmente, el pasado miércoles, Pedro fue detenido por omisión de socorro a los menores y actualmente se encuentra en libertad con cargos.
El parque Manso Calders de Montornès del Vallès es un punto de reunión habitual de los jóvenes del pueblo. Y es que se trata de una enorme zona verde, con los edificios de vivienda a cierta distancia y donde la construcción más cercana es el instituto Vinyes Velles. Además, justo delante del centro escolar se ha habilitado un skatepark.
El inspector jefe de la Policía Local, Sergio Giménez, afirma que se trata de "una zona muy controlada", debido a la proximidad del instituto. Según Giménez, la práctica del botellón es más habitual en zonas más periféricas del municipio.
Pero los vecinos, como Mary, afirman que las pandillas de jóvenes se reúnen de forma habitual por las noches "y se oye mucho jaleo". Cristóbal y María Victoria pasean habitualmente por el parque y aseguran que los fines de semana se encuentran los testimonios del botellón de la noche anterior. "Por la noche molesta el ruido, pero por la mañana lo que molesta es la basura", se queja el matrimonio.
También a cierto sector de jóvenes les molesta esta situación, como los que habitualmente acuden, con el patín en los pies, al skatepark y que deben compartir el espacio con los que van allí a beber. Un grupo de skaters comenta: "antes venían más, pero nos hemos quejado porque dejan las botellas por aquí tiradas y los cristales son peligrosos. Nosotros estamos aquí para ir en bici o patinar".
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