Sevilla se llena de cómicos
La quinta edición del Festival de Teatro apuesta por las actuaciones callejeras
Las calles y salas teatrales de Sevilla vuelven a convertirse en escenario de las propuestas más diversas. El Festival Internacional de Teatro y Artes Escénicas, que se inició ayer, apuesta en esta quinta edición por el espectáculo callejero. Las raíces que nutren la escena desde hace siglos con sus cómicos ambulantes parecen reverdecer en medio de la crisis. La reducción presupuestaria del certamen va de la mano con un fortalecimiento de la imaginación.
"Ésta es un poco una edición de madurez. Hemos conseguido superar que este año estamos en época de crisis. Esto indica que el festival se ha consolidado y es una referencia de la ciudad", afirma el director del certamen, Pedro Álvarez-Ossorio.
Bailarines, músicos, intérpretes y clowns actúan en las salas y las calles
"Las crisis son etapas de crecimiento de las artes escénicas"
Uno de los rasgos notables del festival es su carácter internacional. La organización suele tener como objetivo de cada edición repartir a partes iguales las compañías andaluzas, de otras comunidades autónomas y del resto del mundo. Producciones procedentes de Francia, Colombia, EE UU, Grecia, Reino Unido, Bélgica o Cuba enriquecen un recorrido escénico que cruza mares y fronteras.
El zarpazo de la crisis no sólo afecta a la inversión. Esta edición del festival será más corta: nueve días. Las anteriores duraron dos semanas. El recorte presupuestario es significativo. Se ha pasado de los 400.000 euros de 2009 a los 300.000 euros de 2010. "Las crisis son etapas de crecimiento de las artes escénicas. Los autores crean más y los espectadores van más al teatro en periodos de crisis", asevera el director del festival.
El certamen explora todos los campos del teatro. No hay lugar para los que quieran ceñirse a unas perspectivas muy cerradas del hecho escénico. Eso se traduce en la actuación de bailarines, intérpretes, cantantes, músicos, clowns, artistas circenses... Y, sobre todo, hay un espacio privilegiado: la calle.
Los saltimbanquis, los músicos y los actores medievales hicieron de las plazas y callejas de aldeas y ciudades el lugar donde desplegaban su talento. El festival mantiene intacta esa vocación. Esto se refleja en esta edición en un 36,4% de teatro de calle; un 25% de teatro; un 11,4% de danza; un 11,4% de teatro musical; un 4,5% de danza-teatro; un 4,5% de clown, y un 4,5% de circo.
"El teatro contemporáneo no es el del siglo XIX, en el que el texto era el rey. Las artes escénicas no se limitan a un género específico y trabajan desde el mestizaje. Y nosotros apoyamos esto", resume Álvarez-Ossorio. "Cada espectáculo ha sido seleccionado entre muchísimos. Nuestro objetivo es que el que tenga miedo al teatro contemporáneo vaya a verlo. Y si, por ejemplo, alguien conoce la danza, queremos que se introduzca en el teatro musical. Y, ante todo, lo importante es que Sevilla se convierta en un teatro estos días y los espectadores participen", agrega.
Tántrico Teatro, Hongaresa Teatro, Cel Ras, Teatro de Malta, Beau Geste, Traspasos Kultur, Titzina Teatro, Producciones Imperdibles, Garnica Leimay, Zanguango Teatro, Rootlessroot o Gaitzerdi son algunas de las compañías que dan forma al certamen. El festival es una iniciativa de la asociación Escenarios de Sevilla, que reúne a las salas privadas de la ciudad (La Fundición, La Imperdible, Sala Cero Teatro, Endanza-Espacio Vivo, Pistadigital, Sala El Cachorro, Teatro Salvador Távora, Centro de Investigación TNT y Sala Fli), junto a empresas del tejido teatral sevillano (Viento Sur y Noletia-LaTeatral). La web del certamen es www.sevillafest.com.
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