Turismo de altas hélices
40 turistas franceses con alto poder adquisitivo llegan a Benidorm, meca del turismo, pilotando sus propios helicópteros
Podrían tener una Harley, un Volkswagen escarabajo o un Seat 600, pero tienen el helicóptero como afición. Ayer aterrizaron en el helipuerto de Benidorm más de 40 turistas franceses en 14 helicópteros sólo porque pasaron por allí el día 31 de marzo camino de Marruecos, vieron desde el aire la ciudad y les gustó. Tanto, que perdieron cuatro horas sobrevolando la capital turística valenciana y sus alrededores.
Son miembros del Heliclub de L'Ain, el más grande de Europa, en la ciudad de Bourg en Bresse, a 60 kilómetros de Lyon. "Volando nos gustó Benidorm, era como Nueva York y decidimos dar una vuelta", dice Roger Michel Duclos, que enseguida se puso en contacto con su club para que localizaran el helipuerto de Benidorm, que vieron desde el aire y que está activo desde hace unos meses en régimen de explotación privada.
"Volando, nos gustó Benidorm. Era como Nueva York"
14 autogiros aterrizaron ayer con turistas, por primera vez
Heliactivo es la empresa que lo gestiona gracias a una concesión de la Sociedad Proyectos Temáticos, que cede los terrenos justo al lado de Terra Mítica.
Entre los tripulantes y pasajeros hay médicos, comerciantes, electricistas, veterinarios y hasta un ganadero, aunque la mayoría son empresarios y ejecutivos de empresas multinacionales. Y es que los helicópteros más baratos cuestan 150.000 euros, aunque en Benidorm aterrizó alguno de 400.000.
La localización que ayer realizaron tiene un objetivo claro: "Ver las instalaciones para en un futuro volver de vacaciones". De hecho, uno de los pilotos se quejó de la imposibilidad de aterrizar en los hoteles de la ciudad. Savaert Frank recordó que estuvo tres días de vacaciones en un hotel de Pals, en Girona, de la cadena Relais Chateaux, tras aparcar su aparato en el tejado del hotel.
Y Druguet Philippe, el director del grupo, clamó, casi como un lamento: "Si llegamos a saberlo, nos hubiéramos quedado aquí".
Tienen dinero, son aventureros modernos y se han recorrido todos los rincones europeos con atractivo turístico, con la cortapisa de la autonomía de tres horas que les concede su motor y el hándicap del tamaño del helicóptero, que no les permite cargar más que el equipaje que cabe bajo el asiento en el que viajan.
Ayer llegaron a Benidorm desde Granada y Almería, aunque habían estado haciendo una ruta por Marruecos, visitando ciudades como Tánger, Marraquesh o Tetuán. Han participado en ocho ediciones de la Vuelta a Francia y conseguido llegar hasta Irlanda, Sicilia, Nicosia o Portugal. Se comprometen a volver a Benidorm con más tiempo. Y lo harán en helicóptero.
Las coordenadas de longitud 00O09'05"W y latitud 38O33'47"N, que son las de Benidorm, ya forman parte de la hoja de ruta del turismo de hélice, y de élite.
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