El Bayern, perdido sin Robben
Ante la posible baja del extremo, el equipo alemán se siente inferior al Manchester
Club históricamente optimista y confiado en sus propias fuerzas, el Bayern se tambalea ahora por la probable baja del extremo holandés Robben, que sufrió un pinchazo en los gemelos en la derrota liguera frente al Stuttgart (2-1). La presencia de Robben en el ataque muniqués ha sido tan exagerada en los últimos meses que, ante su presumible ausencia, el cuadro de Louis van Gaal se siente al descubierto ante un rival tan poderoso como el Manchester. Hasta el orgulloso técnico holandés dijo ayer sentir "celos" del United y admitió su inferioridad.
La exuberancia de Robben había disimulado las carencias defensivas del Bayern, muy expuesto a los errores del central belga Van Buyten. Van Gaal confía en recuperar a su central más fiable, el argentino De Michelis, pero pierde en el centro del campo, por sanción, a Schweinsteiger, su hombre de confianza. Ese puesto de mediocentro, junto a Van Bommel, será ocupado por uno de los medios marginados por el entrenador, el ucranio Timoshuck o el turco Altintop.
Es la hora de Ribéry, eclipsado todo el curso por pequeñas lesiones y por su falta de compromiso con el club bávaro. Pero el volante francés necesita volver al escaparate internacional si es que quiere abandonar el Bayern el próximo verano. A expensas de si Mario Gómez se recupera a tiempo o no, Van Gaal cuenta para el ataque con el croata Olic y el alemán Klose, en horas bajas toda la temporada. Claro que Olic, tras ser sustituido en la media parte frente al Stuttgart, criticó a Van Gaal por el cambio en una televisión alemana.
El Manchester llega con todo a Múnich, plaza fatídica para él desde que perdiera allí en un accidente aéreo a medio equipo de los Busby's Boys en 1958. Recuerdos trágicos mezclados con otros de máxima euforia, la inesperada remontada en 1999 en el Camp Nou con los postreros goles de Solskjaer y Sheringham. De aquel partido inborrable no queda nadie en el Bayern, pero sí en el Manchester: Alex Ferguson, en el banquillo; Scholes y Giggs, en el campo. "No puedo creer que hayan pasado ya 11 años", evoca Giggs, que compara al adversario de hoy con el de 1999. "Aquel Bayern era más fuerte físicamente. Este, más habilidoso con Robben y Ribéry". Recuerda Giggs, en todo caso, que el Bayern ha sido cuatro veces campeón de Europa, la última en 2001, en Milán, ante el Valencia mientras que el Manchester ha conquistado la corona europea en tres ocasiones.
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