Una dirección sin contestación interna
El PNV coincide con Alfredo de Miguel en la necesidad de que la investigación acelere sus conclusiones. Cada día que pasa, el desgaste social y el político se acumulan y, además, alientan las especulaciones. Los jeltzales saben que ahora, con el proceso abierto, las conjeturas sobre la finalidad de la supuesta trama oscilan entre el enriquecimiento personal de los ocho imputados y la financiación ilegal del PNV. Esta fatal coyuntura obliga a los jeltzales a exigir la mayor celeridad en el proceso judicial en curso.
En paralelo, Iñaki Gerenabarrena no ha anunciado todavía la convocatoria de ninguna asamblea extraordinaria para abordar la incómoda situación en la que queda ahora el PNV en Álava y, especialmente, el Gobierno de Xabier Agirre en la Diputación, asentado en una recortada representación en Juntas. A su vez, la exigencia de EA compromete las siempre incómodas comisiones de investigación. Eso sí, esta crisis será abordada el próximo lunes por el EBB en su reunión ordinaria.
En el seno del PNV alavés, de momento, no hay ningún movimiento interno que pueda comprometer a Gerenabarrena a pesar de las voces críticas, muy dispersas desde luego, que se dejan escuchar en privado, ya que no existe oposición formal a la actual dirección. También se descarta que tan adversa situación pueda ser aprovechada por los autonomistas para "pasar factura". Nombres como Álvaro Iturritxa, Miguel Ángel Redondo o Pilar García siguen "fuera de circulación".
El escaso protagonismo que los críticos ostentan en la vida interna del PNV alavés impide cualquier alteración de las mayorías, aunque desde esas posiciones se entiende que "ahora" es un "buen momento" para "revisar cómo se están llevando las cosas". En esencia, "no es tanto que Gerenabarrena tenga un control personal, sino que su círculo personal es quien le hace el trabajo", reconocen desde dentro del partido.
Lógicamente existe la posibilidad de que el desencanto por este golpe moral a la honradez del PNV pueda ser aprovechado en algunos batzokis para exigir informaciones muy depuradas sobre las actuaciones de destacados militantes como De Miguel, Telleria, Arriola o Gaztelu. Incluso, todo hace indicar que Telleria ponga su cargo interno a disposición del partido.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.