Bruni-sarkozy: ¿ruptura o bulo?
Medios franceses especulan con que los dos cónyuges tienen otras relaciones
El rumor nació en Twitter y se ha propagado como la pólvora: apenas dos años después de su matrimonio, la pareja Bruni-Sarkozy podría estar, según algunos medios franceses, al borde de la ruptura. Las informaciones apuntan a que la primera dama de Francia, ex modelo y cantante, mantiene desde hace semanas un romance con el músico Benjamin Biolay, ex marido de la actriz Chiara Mastroiani. Al mismo tiempo, sostienen que su ilustre esposo, el presidente Nicolas Sarkozy, se habría refugiado en los brazos de su secretaria de Estado de Medio Ambiente, Chantal Jouanno. Por ahora, el Elíseo se niega a hacer cualquier comentario al respecto.
Todo se aceleró el sábado por la noche, cuando Benjamin Biolay recibió sus galardones como mejor intérprete y mejor disco del año por La Superbe. Un periodista lanzó entonces por la red social de Twitter la indirecta de que el artista tendría un enchufe y, concretamente, que mantenía un idilio con Carla Bruni, esposa del presidente francés. De hecho, la primera dama fue la primera en felicitarle. Algo que en sí no es del todo de extrañar, dado que ambos músicos trabajaron juntos en el último disco de Bruni, Comme si de rien n'était, que salió en 2008.
El Journal du Dimanche echaba más leña al fuego al asegurar que la nueva "pareja" pasó hace unas semanas unas vacaciones en Tailandia y que el propio Sarkozy mandó un avión para que su esposa regresara antes de lo previsto. Aquella entrada en el blog ha sido desde entonces eliminada, debido a que "atenta gravemente contra la vida privada" con los comentarios publicados. "Es ahora más que un rumor en los blogs", se aventuraba a decir entonces el blog, que añadía que el presidente encontró consuelo en su secretaria de Medio Ambiente, Chantal Jouanno. Otro aseguró incluso que Bruni ha abandonado la residencia presidencial y se ha instalado ya extraoficialmente en el piso parisino de Biolay.
Ayer la prensa inglesa también se hacía eco de la posible crisis de la pareja que vive en el Elíseo.
El presidente y la ex modelo se conocieron en una cena en noviembre de 2007, poco tiempo después del divorcio de Sarkozy con su primera esposa, Cecilia. La pareja se casó a los pocos meses. Bruni encarna desde entonces el papel de primera dama discreta y glamurosa.
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