Terror de ultratumba en 3D

Entre las tumbas del Cementerio de Valencia a la luz de un desapacible atardecer de invierno, con un ángel de mármol al fondo y bajo una fina lluvia que da más inquietud a la escena, la niña Indira Viana, vestida con un abrigo rojo con una estrella de David cosida en la solapa, rompe el silencio con un grito de terror cuando el rostro desfigurado por las quemaduras del actor valenciano Sergi Vidal se acerca a su cara. A continuación, es él el que proyecta contra las lápidas una monstruosa e interminable carcajada. Indira, ya fuera de plano, no para de reírse. "Corten", suena de fondo.

Así transcurría el pasado martes uno de los cinco días de rodaje previstos para capturar todos los planos de Ángela, el primer cortometraje de terror rodado en la Comunidad Valenciana en tres dimensiones y en alta definición digital. Dirigido por Alberto González y Carlos P. Santamaría, el corto se filma en inglés para ampliar su mercado y además del camposanto de Valencia también se ha rodado en las galerías del cementerio de Alcoi.

El éxito de Avatar, de James Cameron, impulsa en estos momentos las producciones en 3-D, y en Valencia hay una empresa que cuenta con la tecnología para ello: Kronomav. Se usa una cámara especial, con dos objetivos separados algo más de seis centímetros (la distancia que hay entre los dos ojos), que además cuenta con sofisticados sistemas de corrección para hacer converger los focos al cambiar la toma.

"La mayor dificultad es que no conocíamos los problemas que conlleva rodar con esta tecnología", explica González. Por ejemplo, cuenta que de momento no se puede hacer zoom con estos objetivos (acercar o alejar la imagen en el mismo plano) aunque sí permiten hacer movimientos de cámara o usar una grúa. También explica que en Avatar los planos cortos se rodaron con una sola cámara y luego "se falsea el 3D con el ordenador, nosotros lo hacemos en algunos planos".

El corto pretende ser un homenaje a los niños asesinados en los exterminios. De hecho, en principio se iba a rodar en Polonia, pero finalmente se escogió los cementerios de Valencia y Alcoi por sus buenas localizaciones. En la trama, Ángela, la protagonista interpretada por Indira, seleccionada por su perfecta dicción en inglés, acompaña a su madre al cementerio una tarde de otoño. Allí conoce a Etham, "un niño que le llevará a conocer la magia que se esconde entre las lápidas, mausoleos y galerías del lugar", según la sinopsis del proyecto.

El martes, entre cortes, ajustes de foco y revisiones en la pantalla de ordenador, el rodaje avanzaba bajo el agua. "Cuanto más llueva, mejor, así da más miedo", exclama contento Vidal. Así es, miedo de ultratumba en 3D.