Aguayo cita a los partidos el jueves para acelerar el pacto anticrisis

La algarada parlamentaria que se organizó el jueves en el Parlamento, tras abandonar José Antonio Griñán el pleno antes de que a Javier Arenas le diera tiempo de entregarle sus propuestas, continuó ayer con un rosario de declaraciones de PP y PSOE. No obstante, el compromiso de abrir una mesa de trabajo entre todos para acordar medidas se mantuvo por encima de los ruidos de sables y la consejera de Economía, Carmen Martínez-Aguayo, citó a los partidos para el jueves próximo.

La intención es hablar del método y calendario de las negociaciones, si bien se podrían ya intercambiar los primeros documentos. La Junta acudirá a las reuniones con un amplio bloque de propuestas que incluye el programa elaborado por Andalucía para la Ley de Economía Sostenible, las 351 medidas recogidas en el VII Acuerdo de Concertación, las 10 medidas fiscales anunciadas hace 15 días en el Parlamento y los planes de formación para jóvenes, liquidez para pymes y rehabilitación de viviendas en el medio rural y el entorno urbano que ya ha apuntado el propio presidente andaluz.

El Gobierno pondrá encima de la mesa los proyectos que ya ha anunciado

Los socialistas sospechan que el PP sólo quiere sacar ventaja política

Martínez-Aguayo dijo ayer en Córdoba que está todo preparado para el diálogo, sin embargo, comentó que la actuación de Arenas en el Parlamento andaluz es "una dudosa manera" de demostrar que el PP "quiere contribuir a mejorar la economía y la tierra", y calificó de "sorprendente" que la propuesta que el presidente de los populares andaluces quiso entregar a Griñán era "idéntica" a una proposición no de ley que el PP había presentado "en ese mismo momento". Por esta razón, mostró "serias dudas" de que el PP tenga "voluntad de pacto y no piense en una maniobra de propaganda más".

Otro consejero, el de Gobernación, Luis Pizarro, acusó al PP de hacer "teatro". Según él, tras la oferta de José Antonio Griñán de reunirse con Arenas, "quedó al descubierto la falta de respeto hacia el contrario por parte de los populares". El consejero agregó que el PP demuestra "que no le importa la situación económica ni la angustia que están sufriendo las familias a causa de la crisis, sino intentar sacar ventaja política".

Los populares también abundaron en las críticas a los socialistas y al presidente de la Junta. La portavoz del PP andaluz, Rosario Soto, aseguró que el gesto de Griñán no fue sólo hacia Arenas, sino también "contra todos los andaluces y, especialmente, el millón de parados", ya que lo único que pretendía era darle las medidas del PP contra la crisis.

"Los políticos tenemos momentos clave en los que enseñamos cómo somos y Griñán nos enseñó ayer nítidamente cómo es él. Un 50% de soberbia y un 50% ira", subrayó Soto, quien añadió que así lo demostró cuando "se levantó y dio la espalda" al presidente del PP andaluz.

El izquierdista Diego Valderas también terció en la polémica, y dijo que si la situación económica actual no fuera tan grave, "la soberbia" del PSOE no le permitiría sentarse en una mesa de diálogo. Valderas se mostró "desconfiado" respecto a estas reuniones, porque, según su experiencia, el PSOE tiene "una gran tortícolis de derecha porque sólo mira a políticas conservadoras". Sin embargo, el Gobierno andaluz "necesita un giro a la izquierda muy profundo y un cambio de rumbo total de la política económica en Andalucía". Valderas aportará 100 medidas contra la crisis.