Nueve centésimas para la gloria

El suizo Didier Defago, un segundón aplicado en la élite del esquí, tocó el cielo en el esperado descenso masculino de Vancouver, aplazado el sábado por el mal tiempo. El veterano de 32 años ganó una de las pruebas más emocionantes de la historia olímpica. Los mejores de la prueba reina del esquí alpino, la más rápida, rozaron los 120 kilómetros por hora y los tiempos se mejoraron sucesivamente por instantes. El podio estuvo en sólo nueve centésimas y se quedaron fuera los máximos favoritos, los también suizos Carlo Janka y Didier Cuche, o el austriaco Michael Walchhofer.

Bode Miller, el estadounidense que había recuperado su mejor forma para los Juegos, brilló esta vez a diferencia de su fracaso en Turín 2006, pero se tuvo que conformar con el bronce. Siempre aparece un noruego y el polivalente Aksel Lund Svindal, ganador de la última Copa del Mundo absoluta, se llevó la plata.

El estadounidense, aun recobrada la forma, sigue sin subirse a lo más alto del podio

Cuando Defago llegó a Vancouver ni siquiera tenía la plaza asegurada en el equipo suizo. Se la ganó en los entrenamientos. Otra cosa habría sido si los Juegos se hubieran disputado el año pasado, cuando alcanzó su única gran gloria con los triunfos en los dos descensos más prestigiosos del circuito, en Wengen (Suiza) y Kitzbuhel (Austria. Antes, sólo un supergigante en Val Gardena (Italia) ¡siete años antes! en 2002.

Pero la gloria olímpica se juega en una sola apuesta cada cuatro años y Defago la ganó para hacer recordar a estrellas suizas del pasado como Pirmin Zürbriggen oro en Calgary 88 (Canadá se les da bien a los suizos) o Bernhard Russi, que ganó en Sapporo 72.

Miller sigue sin subir a lo más alto del podio tras sus platas en el gigante y la combinada de Salt Lake City 2002. Su tortuosa carrera le llevó a apartarse de la disciplina del equipo estadounidense, a la que sólo ha vuelto para poder participar en los Juegos. Pero el cuádruple campeón mundial en 2003 y 2005, y doble ganador del circuito de la Copa del Mundo en 2005 y 2008 tiene aún su gran asignatura olímpica pendiente. España osciló entre la discrección y el desastre. Lo habitual. Ferrán Terra acabó 44º , a 4m 54s y Paul de la Cuesta 51º, a 5m 53s. De 65 participantes. Al menos pueden decir que terminaron en su debut olímpico. Cinco competidores se salieron.

En los 10 kilómetros de esquí de fondo, Laura Orgue fue 38ª de 78 participantes, un puesto también discreto, pero un auténtico logro para la casi nula historia nórdica española.

El desastre español se repetía en Cypress Mountain, pues Jordi Font, milagroso cuarto en Turín 2006, no pudo salir en la segunda manga del snowboardcrooss tras lesionarse. Sólo un checo y un andorrano, no finalizaron. Sí lo hizo Regino Hernández, el otro español, que fue 31º.

Resultados. Hombres. Descenso. 1. Didier Defago (SUI). 2. Aksel Lund Svindal (NOR). 3. Bode Miller (USA). 44. Ferran Terra. 51. Paul de la Cuesta. Mujeres. Esquí de fondo.

10km. 1. Charlotte Kalla (SUE). 38. Laura Orgue.