Sémper busca acuerdos con el PSE y PNV para proyectos "sin resolver"

La acción como apuesta y reto para los populares guipuzcoanos. El presidente de Partido Popular (PP) de Guipúzcoa, Borja Sémper, busca acuerdos con los principales partidos vascos, PSE y PNV, para dar salida a proyectos que "no pueden esperar y que están sin resolver". "Vayamos de la mano en aquellas cosas en las que tenemos capacidad de ir de la mano" en este territorio, subrayó a yer ante los medios de comunicación en la capital guipuzcoana.

Sémper explicó que cuestiones enconadas como el puerto de Pasajes y el aeropuerto de San Sebastián no pueden esperar más tiempo para resolverse, y que "sufrirán mucho desde el punto de vista económico en los próximos años" si no hay un consenso entre los principales partidos vascos. Para tratar estos temas, se reúne hoy una amplia representación de la Ejecutiva popular guipuzcoana con la del PSE, dentro del marco de compromiso de ofrecimiento que adoptó Sémper en el último Congreso provincial del PP de Guipúzcoa y del que salió catapultado como líder de los populares guipuzcoanos.

Ronda de visitas

A pesar de que la agenda está abierta, los populares plantearán a los socialistas la necesidad de darle "una revisión integral a la fiscalidad guipuzcoana", además de la situación de la crisis económica y la necesidad de redefinir "la actitud de las instituciones con respecto a las empresas y el apoyo al emprendedor". Sémper, sacó a relucir entre un café y otro, la "aberración" que le parece el impuesto que plantea la diputación cobrar a los guipuzcoanos para poder circular por las carreteras vascas.

La Ejecutiva popular de Guipúzcoa tiene previsto reunirse también en los próximos días con el GBB del PNV con quien interesa "especialmente" tener una "relación normalizada" al tratarse de la formación "con más respaldo electoral" en Guipúzcoa.

A la pregunta de si el lehendakari Patxi López está cumpliendo con el acuerdo suscrito con los populares, apoyo que materializó su investidura, Sémper señaló que sí pero "con una intensidad más baja de la que nos gustaría", señaló, a la vez que felicitó la gestión de Patxi López. "El lehendakari tiene sus tiempos y marca su agenda como es lógico pero a nosotros nos gustaría otro ritmo evidentemente".