Jóvenes intrigantes
GUILLEM MORALES Con El habitante incierto demostró su dominio de la intriga y el desconcierto. Los ojos de Julia, donde dirige a una Belén Rueda obsesionada con descifrar la muerte de su hermana, confirma su talento. Produce Guillermo del Toro y la veremos en octubre. Hay ración doble de Belén Rueda y Eduardo Noriega. Protagonizan El mal ajeno, del debutante Óskar Santos. En palabras de su productor, Alejandro Amenábar, "un melodrama fantástico con un elemento muy naturalista". Llegará en primavera.
EUGENIO MIRA Llevó a Corey Feldman (la ex estrella infantil olvidada de los ochenta) a los extremos de la locura en The birthday un delirante cruce entre el universo lynchiano y Four rooms. A finales de este año, su desbordante imaginación nos brindará un cuento oscuro que nos traslada a la Barcelona del siglo XIX. Protagonizan Bárbara Goenaga, Eduardo Noriega y Félix Gómez. A pesar de que todo apunta a un thriller barroco y retrofuturista, la factura final del filme remite a piezas como El truco final, Desde el infierno o El hombre elefante.
EDUARDO CHAPERO-JACKSON El cortometrajista que desafió las leyes de la distribución estrenando su brillante trilogía en cines por fin mostrará su primer largo. En Verbo rescata a su amigo Miguel Ángel Silvestre, con quien ya trabajara en la parábola apocalíptica The end, de la sombra de El Duque; y a Verónica Echegui, de la de La Juani. Ambos emprenden una aventura extradimensional acompañados de la debutante Alba García, una quinceañera con un sexto sentido que podría cambiar el mundo.
RODRIGO CORTÉSMuchos le recordarán por Concursante, la sátira sobre la sociedad de consumo donde un espídico Leonardo Sbaraglia lo ganaba y perdía todo en un tiempo récord. A finales de enero estrenará en el festival de Sundance su segundo largo, Buried (Enterrado). Esta vez el que las pasa canutas es Ryan Reynolds (marido de Scarlett Johansson), que interpreta a un civil atrapado en un ataúd tras un ataque en Irak. Con tan sólo un teléfono móvil y un mechero, se las tiene que ingeniar para salir antes de que se le agote el oxígeno.
