España mantiene su legación abierta, pero restringe el acceso

El Ministerio de Asuntos Exteriores español decidió ayer mantener "abierta y operativa" su embajada en la capital yemení, Saná, pero optó por restringir el acceso del público a la legación por motivos de seguridad ante la creciente tensión en el país de la península Arábiga.

En Yemen residen de forma permanente una veintena de ciudadanos españoles, según datos del ministerio. En la embajada, que fue inaugurada en abril de 2006, trabajan actualmente dos diplomáticos y media docena de empleados. El embajador se encuentra temporalmente en España por motivos personales, según informa Efe. Contactados telefónicamente por este diario, funcionarios de la embajada declinaron comentar la situación, remitiendo a los comunicados oficiales emitidos en Madrid.

Yemen está catalogado por el Ministerio de Exteriores como un país de alto riesgo desde 2007. En julio de ese año ocho turistas españoles fallecieron en un atentado cometido por Al Qaeda contra el convoy de todoterrenos en el que viajaban junto a otros turistas. El ataque fue perpetrado con un coche bomba en la provincia de Mareb, a unos 170 kilómetros al este de la capital. El Gobierno de Madrid consideró entonces que el ataque no iba dirigido específicamente contra intereses españoles.

España mantiene relaciones diplomáticas con esta república desde 1990, cuando se reunificaron Yemen del Norte y Yemen del Sur. El país tiene una superficie parecida a la de España y una población de unos 21 millones de habitantes.