Predicar la concertación por toda Andalucía

El VII Acuerdo de Concertación Social de Andalucía firmado recientemente por la Junta y los agentes sociales incluye una novedad respecto a los seis anteriores que es casi una misión evangélica: Su presentación a la sociedad andaluza en cada una de las ocho provincias.

La divulgación empezó ayer en Málaga, en un acto institucional en el que los tres agentes sociales firmantes, CC OO, UGT y Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA) predicaron sobre el valor del entendimiento como instrumento estratégico para el progreso económico y social, frente a las críticas de seguidismo lanzadas por el PP. "No firmamos para reforzar los gobiernos ni para hacer oposiciones, siempre lo haremos así", expuso Francisco Carbonero, secretario general de CC OO. "Hemos acordado aquello que honestamente creemos que va a beneficiar a los trabajadores, que quieren acuerdos y solucione y no estar todo el día en la calle protestando por algo", añadió Manuel Pastrana, de UGT.

Especialmente incisivo fue el presidente de la CEA, Santiago Herrero, quien reivindicó el acuerdo social como "el mejor instrumento para el desarrollo" y proclamó: "Con independencia de quien gobierne en cada momento, la CEA siempre va a defender la concertación como el marco más favorable que la confrontación, no se puede interpretar lo que en otro lugar se ve bien como que aquí significa dependencia los firmantes". Resaltó el enorme apoyo que el pacto ha tenido en los órganos internos de la CEA, e ironizó sobre el único voto en contra: "Siempre hay algunos que prefieren quedarse de reserva espiritual de otros modelos". El presidente de la Junta, José Antonio Griñán, resaltó el valor añadido de que el andaluz sea el único acuerdo de concertación firmado en España en tiempos de crisis. Mostró su absoluta seguridad de que "con este pacto vamos a salir de la crisis y lo vamos a hacer en mejores circunstancias", y explicó que las 351 medidas contempladas están encaminadas a este objetivo primero, y en una segunda fase a procurar un nuevo modelo productivo sostenible. El pacto, según Griñán, "genera confianza y expectativas".