La nueva identidad del Valencia

"¡Que me critiquen por ser demasiado ofensivo!". Así se defendía, cual jabato, Unai Emery tras los primeros compases de la Liga. Fue a mediados de septiembre, pocos días antes del partido contra el Getafe, la única derrota del Valencia (3-1). Entonces le llovían bofetadas al técnico por todos los lados y mensajes desde el palco: menos atacar y más defenderse, le ordenaron desde los despachos.

Aunque hace de la tozudez una virtud en muchas ocasiones, Emery se ha dejado aconsejar. Ha realizado pequeños cambios en el juego del equipo, sin tener que renunciar a su ideal de fútbol. Y, además, ha dado con su once. El Valencia, que podría situarse a un punto de la cabeza de la Liga antes del clásico, recibe hoy en Mestalla (20.00, Canal + Liga y GolTV) al Mallorca, también en estado de gracia.

El centro de gravedad se sitúa ahora en Pablo, Silva, Mata y Villa

Navarro ha 'renacido' y se han asentado Bruno y Dealbert, formados en Segunda

"El Valencia ha encontrado una dinámica", reconoce el lateral Bruno. Emery ya gusta. Y lo ha conseguido sin renunciar del todo a su filosofía: el equipo ya no gira como antaño en torno a su defensa, rejuvenecida. El centro de gravedad se sitúa ahora en la delantera: Pablo o Joaquín, Silva, Mata y Villa se sobran y bastan cuando cogen el balón. Ellos llevan el peso del equipo.

Claro que la defensa ya funciona. A pesar de tratarse de una línea de cuatro bastante joven, totalmente nueva y no demasiado rodada, al menos en Primera. A diferencia de retaguardias imborrables como aquélla en la que se cimentaron los dos títulos (Liga y Copa de la UEFA) de 2004 -Curro, Pellegrino, Ayala y Carboni-, de una edad media superior a los 32 años, la defensa de este Valencia tiene 27 años.

Además, y salvo la excepción del central David Navarro, que ya pertenecía al club, tanto Bruno (lateral, de 29 años) como Dealbert (central, de 27) son dos jugadores formados en la Segunda División. De hecho, Dealbert es un recién llegado a la categoría. En el lateral izquierdo actúa Mathieu (de 24), procedente de la Liga francesa. "El equipo está más asentado ahora porque necesitaba partidos", dice Bruno, uno de los pilares del Almería que ascendió con Emery.

Tiempo, partidos y algunos cambios. Alexis (24 años), uno de los jugadores más utilizados el curso pasado -formó en varias ocasiones también como lateral-, ha quedado relegado a la suplencia. Su falta de concentración al inicio de la Liga y el genial funcionamiento de la pareja formada por el resucitado Navarro y Dealbert tienen la culpa. También ha habido alternancia en la portería. Desde que César (38 años) sustituyó a Moyà (25) como guardameta en la Liga, el equipo sólo ha recibido dos goles en seis jornadas. En las cinco primeras soportó nueve. "Ha habido dos o tres cambios y se ha acertado", asume Juan Carlos Carcedo, segundo de Emery.

La excepción es Miguel. El internacional portugués no ha sido convocado esta semana por segunda vez consecutiva. El viernes pasado llegó tarde al entrenamiento. Era la segunda ocasión en que se dormía. Y ya se le busca acomodo para traspasarlo este invierno.

Por otro lado, el cuerpo técnico ha aplicado ligeros retoques en el juego, demasiado alocado antes: todos atacaban, pero no todos defendían. "Sabemos de los jugadores que tenemos arriba y buscamos equilibrar el equipo. Ahora intentamos que los laterales suban menos. Lo hacen en contadas ocasiones. Y los pivotes hacen asimismo más coberturas y cubren los espacios", explica Carcedo.

Los técnicos han conseguido, por fin, dotar de una identidad al Valencia. Además, saben ya cómo y cuándo jugar de qué manera: "Nos gusta que el equipo sea dominador, aunque no en todos los partidos se puede. Entonces, está más replegado y explota una de sus mejores cualidades: salir a la contra con pocos toques. Hemos ganado en oficio", añade Carcedo.

Habrá que ir con cuidado con el Mallorca, advierte Bruno; "nos estamos acostumbrando a las salidas rápidas [así venció a Osasuna por 1-3], pero el Mallorca va a venir a Valencia a esperar nuestro fallo. Deberemos tener paciencia".