La Copa del América se acerca otra vez a Valencia
Los tribunales fallan en contra de la sede de Emiratos Árabes
La 33ª edición de la Copa del América se ha convertido en el cuento de nunca acabar. La última sentencia del Tribunal Supremo de Nueva York, el único con capacidad para dictaminar sobre la competición de acuerdo con el Deed of Gift -documento fundacional de la centenaria competición náutica-, acerca de nuevo la competición a la ciudad de Valencia, sede inicial de la 33ª Copa del América y sede, también, de la anterior edición en 2007.
El Tribunal Supremo de Nueva York dictaminó ayer que la sede de Ras el Jaima, en los Emiratos Árabes, incumple las normas de la regata. La justicia da la razón al estadounidense BMW-Oracle, que había denunciado el destino elegido por el defensor de la jarra de la Cien Guineas, el Alinghi, por creerlo contrario al Deed of Gift.
La final, que enfrentará exclusivamente a ambos equipos en un duelo al mejor de tres regatas -tras un inacabable proceso judicial que borró de la competición al resto de participantes-, debe celebrarse en febrero de 2010. La premura con que debería organizarse el encuentro hace que, otra vez, Valencia -donde la infraestructura ideada para la anterior Copa sigue intacta- se postule como favorita. Si bien, los últimos desplantes del Alinghi, después de que la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, expresara su "cariñito por Ernesto [Bertarelli]", patrón de los suizos, y a pesar de que éste prometió devolver la Copa a Valencia, obligan a pensar en cualquier alternativa.
Según explica el Oracle, la anterior sentencia del juez Herman Cahn, del tribunal neoyorkino -que ha llevado el caso desde sus inicios, en julio de 2007-, aceptaba Valencia como sede del cara a cara entre el Alinghi y el Oracle, como una excepción, pues no se puede competir en febrero en el hemisferio norte. En caso contrario, y siempre de acuerdo con el Deed of Gift, esa final debería celebrarse en el hemisferio sur. Y Ras El Jaima no está en el hemisferio sur.
El Alinghi deberá anunciar con la mayor celeridad cuál es la ciudad elegida. Esta nueva decisión judicial trastoca los planes de los suizos. El equipo de Bertarelli ya llevaba varias semanas entrenándose en los Emiratos Árabes, donde ya tenía el barco multicasco para la competición.
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