Astros, genios y promesas

La voz grave y cazallera de Josele Santiago marcó el primer momento de asistencia obligada del Mimed de este año, que solventó el cambio de fechas y de emplazamiento con una respuesta de público muy desigual. El sábado resultó un día desangelado, pero los conciertos del viernes fueron mucho más concurridos. A Josele Santiago sólo le hizo falta su guitarra para sentar cátedra, ya fuera con cualquiera de los temas de su sobresaliente producción en solitario como con esos clásicos de Los Enemigos que nunca se suele guardar, caso de Desde el jergón.

El pop inflamadamente melódico y abiertamente comercial de los granadinos Napoleón Solo, aún tramado con alfileres y ejecutado sin mucho aplomo, le tomó el relevo, e hizo preguntarse qué méritos habían contraído para figurar en el cartel, aparte de contar con el gran Eric Jiménez (Los Planetas) a la batería. El interrogante aún cobraba más sentido tras el cálido concierto de Maderita, todo un derroche de folk autóctono delicado y evocador, de la mano de Julio Bustamante y los integrantes de Ciudadano. El murmullo con el que se topó su delicioso set hizo recordar aquello -todo un clásico de los axiomas festivaleros- de que seguramente no era ni la mejor hora ni el mejor recinto para verles. Por la sencilla razón de que todo el mundo estaba allí para ver a unos Planetas que no defraudaron, que despacharon más de una hora en la que sus letanías aflamencadas fueron dando paso gradualmente a añejas piedras angulares del rock de este país como Santos que yo te pinté, Segundo premio o De Viaje, pese a que Jota se empeñe a veces en ser el Curro Romero de nuestro rock (se olvidó de alguna letra ante el alborozo general).

Fernando Alfaro fue el sábado el segundo clásico del rock hispano que se plantó solo con su guitarra en Mislata. Y tratándose del hombre con mejor repertorio de todo el cartel, poco chorro de voz le hizo falta para convencer en un concierto en el que primaron los temas de Surfin'Bichos sobre los de Chucho o los de su corta vida en solitario. La súper banda local que formaban luego Tórtel, con Jorge de Ciudadano, Pau Roca de La Habitación Roja, Gilbertástico y Manolo Tarancón ofreció una exquisita demostración de folk pop pastoral y de aliento terapéutico. De lo mejor de todo el fin de semana.