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El incendio de un autocar acaba con tres detenidos

Algunos pasajeros se enfrentaron con bomberos y Guardia Civil en la A-4 porque querían rescatar sus equipajes

F. Javier Barroso

Tres detenidos, cuatro heridos leves, un altercado en plena autovía de Andalucía (A-4) y un autocar incendiado. Ése es el balance de la bronca que mantuvo ayer un reducido grupo de pasajeros procedentes de Casablanca (Marruecos) con agentes de la autoridad, después de que se incendiara el vehículo en el que viajaban 40 marroquíes con un voluminoso equipaje. Los tres arrestados están acusados de lesionar a los policías y de atentar contra ellos, según fuentes policiales.

La bronca comenzó alrededor de las once de la mañana en el kilómetro 47 de la A-4, en el término municipal de Aranjuez. Un autocar de la empresa Linesur-Tramesa con destino final en Lleida sufrió un incendio por causas aún no determinadas. El conductor paró en el arcén y avisó a los servicios de emergencia. Los bomberos de la Comunidad de Madrid recibieron la llamada a las 11.00, según un portavoz de Emergencias 112. Llegaron en nueve minutos al lugar: justo a las 11.09.

Una arrestada huyó hacia los vehículos de la autopista para no identificarse
El resto de los viajeros continuó hasta Lleida en otro autobús

El recibimiento no fue "extraordinariamente bueno", según la versión de la Guardia Civil. Algunos pasajeros la emprendieron a pedradas contra los bomberos, porque, en su percepción, llegaron tarde al lugar. Los efectivos avisaron a los agentes del instituto armado, que aplacaron los ánimos de los alborotadores, en especial de tres. El incendio obligó a cortar la A-4 durante cerca de una hora. Después se permitió el paso por un carril, lo que provocó varios kilómetros de atasco en los carriles de entrada a la capital, según las mismas fuentes de la Guardia Civil.

Los ánimos se fueron caldeando entre los viajeros porque el fuego podía afectar a los equipajes -el transporte por carretera les permite viajar con gran volumen de maletas y bultos, sin tanta limitación como en el caso del viaje en avión- y los bomberos no permitían acercarse al autocar, que estaba en llamas. Más viajeros protestaron.

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Los guardias civiles lograron detenerles durante un breve periodo de tiempo. Pero ante el cariz que estaban tomando las crecientes protestas, decidieron pedir refuerzos al Cuerpo Nacional de Policía y a la Policía Local de Aranjuez. Ambos cuerpos mandaron refuerzos.

Cuando llegaron los policías nacionales, pidieron la documentación a uno de los presuntos alborotadores. En ese momento, éste le propinó un puñetazo a un agente. Sus compañeros le detuvieron, pese a su resistencia. También se metió en el altercado su hermano, que fue igualmente detenido por los policías, según la versión de la Guardia Civil. Ambos son Ahmed y Elradine N., de 41 y 35 años, respectivamente, en Marruecos. Viven en Leganés, según fuentes policiales.

La tercera detenida fue Khaidja el M., de 31 años, y residente en Lleida. La Guardia Civil la arrestó cuando se metió en medio de la circulación de la A-4 para no dar la documentación a los policías.

Entre los agentes, hubo cuatro lesionados de carácter leve, entre ellos un policía local de Aranjuez. Algunos testigos hablaron de "batalla campal" con la policía, informa Europa Press. El resto de los 40 pasajeros increparon a los agentes en el momento de la detención, pero no hubo graves altercados, según la Guardia Civil.

Los arrestados fueron trasladados a la comisaría acusados del delito de atentado y resistencia a un agente de la autoridad y lesiones leves.

Los otros pasajeros tuvieron que esperar unas dos horas en la carretera hasta que la empresa mandó otro autocar y pudieron continuar su viaje hasta la estación de Méndez Álvaro y luego a Lleida.

La autovía A-4 recuperó la normalidad hacia las dos de la tarde, tres horas después de declarado el incendio.

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Sobre la firma

F. Javier Barroso
Es redactor de la sección de Madrid de EL PAÍS, a la que llegó en 1994. También ha colaborado en la SER y en Onda Madrid. Ha sido tertuliano en TVE, Telemadrid y Cuatro, entre otros medios. Licenciado en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid, está especializado en Sucesos y Tribunales. Además, es abogado y criminólogo.

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