Los zoológicos gallegos suspenden en seguridad y conservación

Jaulas pequeñas, distancias de seguridad insuficientes, animales viviendo en condiciones insalubres, masificación o relaciones con centros de rescate de dudosa reputación. Estas son algunas de las causas por las que los zoológicos y acuarios de Galicia están denunciados ante la Comisión Europea por incumplir las normas sobre fauna en parques. Sus seis centros de animales son parte de la larga lista de instalaciones en las que España ha de realizar cambios si no quiere verlos cerrados. Así lo explica la asociación denunciante, Infozoos, que pide a las comunidades autónomas que pongan en marcha la ley de conservación de la fauna silvestre en los parques zoológicos de 2003.

Galicia ya lo hace. Desde este año puso a trabajar a uno de los departamentos de Medio Rural para vigilar que los centros de animales cumplan con la normativa. "No lo tienen muy difícil", tranquiliza el equipo de biólogos de la asociación, "están en el punto medio de todo el Estado y pueden mejorar sus fallos". Para ellos, los centros deberían adaptarse a la normativa e intentar entrar en asociaciones internacionales de zoos y acuarios, para realizar redes de trabajo en investigación y conservación, "una de las principales razones que justifican la existencia de los zoos", cuentan.

En la mayoría de los casos no es sólo la suciedad y desorganización lo que perjudica a los animales. Si bien Galicia no es una de las comunidades que más dañe al bienestar de la fauna, destaca por no recrear los hábitats de origen de los animales. "Los osos deberían poder esconderse en cuevas y los primates trepar por los árboles", lamenta una portavoz de Infozoos. La función informativa y educativa tampoco es un punto fuerte de los zoos gallegos. La cartelería debe mejorarse, sobre todo en los acuarios.

Este equipo de biólogos detectó en Galicia una serie de deficiencias que en muchos casos ya están solventándose. Es el caso de Vigozoo y Marcelle que, tras la primera visita de los inspectores, ya están ampliando y mejorando las instalaciones. Lo mismo ocurre con la cartelería del acuario coruñés Finisterrae.