País sin justicia
Sólo los malpensados conectarán la huelga de los jueces con el Día por un Trabajo Decente. Otros, teniendo en cuenta que para hacer huelga lo primero es trabajar, explicarán el escaso seguimiento y repercusión de su huelga por la tradicional vagancia de no pocos jueces, que convierte a España en país sin ley aplicada, ya que "justicia lenta no es justicia"; aun suponiendo, que no es poco suponer, que sea ajustada a derecho, hoy que cada vez resulta más difícil pronosticar razonablemente cuál pueda ser una sentencia. "Quien lo sufrió lo sabe". Vagancia tan característica que lleva a algunos jueces a criticar sin pudor, e incluso condenar, a los pocos jueces que destacan... por trabajar mucho. Cambiar para bien la situación exige urgentemente, no sólo más medios materiales, sino un profundo cambio de mentalidad y, para ello, en parte, de personal.