¡Válgame Dios!

En vano buscara uno influencias del grandioso Paradise lost en el descerebrado arcángel Gabriel de El Messies, de alitas minúsculas y torcidas. No, Toni Albà no se ha inspirado precisamente en Milton -ni en Doré, ya que estamos- para su payasa criatura celestial. El popular actor y su no menos conocido colega Fermí Fernandes se han embarcado en una revisión "a lo Monty Python" de episodios de la historia sagrada centrados en el advenimiento (la venida del Mesías Jesucristo), con pasajes tan delicados para una aproximación jocosa como la anunciación, la virginal concepción mariana y el nacimiento.

La obra que interpretan Albà y Fernandes, con el apoyo de la soprano Elena Roche y bajo dirección de Roger Peña Carulla, es The Messiah, del británico Patrick Barlow, que mezcla la broma sacra con el oratorio de Händel. En el espectáculo, que se estrena mañana en la Villarroel, dos componentes del Teatre Nacional de Reus (!) -un clown listo y otro tonto- ofrecen una conferencia dramatizada sobre la figura del Mesías, encarnando, con gran despliegue de fregolismo, a multitud de personajes de los Evangelios, desde Herodes hasta la Virgen María (a cargo, Dios le coja confesado, de Albà), pasando por centuriones romanos, pastores y la mula, o como dicen ellos, "tot Déu, incloent-hi Déu".

Los actores de 'El Messies' defienden con ironía la "libertad de 'ofensión"

Recalcó ayer el director al presentar el montaje que éste "en absoluto es irreverente", lo que hizo enmarcar alguna ceja. Más aún porque Albà se apresuró a apostillar: "La (sagrada) Familia a la que se hace referencia no se puede molestar, porque no vendrá, por un problema de fundamentos" (¿lo pillan?). Y añadió: "La pretensión no es ofender, pero si quieres ofenderte, puedes, sin problemas". Reivindicó el actor, tras asegurar que tienen los parabienes del papa Ratzinger, cosa que por supuesto nadie se creyó (Fernandes apuntó que él es más "de la disciplina de Ratzinger Z"), la "libertad de ofensión", es decir "el derecho a ofenderte si te da la gana", aunque, eso sí, pidió que nadie se ofenda antes de ver el espectáculo, o sea que pasen primero por taquilla. "No vamos a burlarnos de nada", trató de tranquilizar Fernandes, pero Albà puso cara de Barrabás y soltó: "¿Ah no?". De hecho, continuó Fernandes, el espectáculo abarca sólo desde que en el cielo se aperciben del caos terrenal hasta el nacimiento de Jesús. "No lo crucificamos ni nada". Ambos actores coincidieron en señalar lo bien que les ha ido la tradición local de Pastorets para acercarse al texto del británico. "Aquí todos hemos hecho pastorets o passions, excepto Flotats, y así le ha ido", reflexionó Albà, que subrayó sin que se le escapara la risa el interés de El Messies "para comprender los orígenes de nuestra cultura". Como salen los Reyes Magos, se vio obligado a puntualizar que el de España no aparece. "Aquí no hay imitación ninguna de la tele, incluso hemos quitado a Cruyff", subrayó.