Madrid renuncia a la Copa Davis
La final, del 4 al 6 de diciembre, enfrentará a España y la República Checa en Barcelona, Málaga, Tenerife o Valencia
Madrid escenificó ayer la primera consecuencia de haber perdido la organización de los Juegos Olímpicos de 2016: pese al interés de la federación local y a que cuenta con la mejor instalación del país, la futurista Caja Mágica, la capital decidió no presentar su candidatura a la final de la Copa Davis, que enfrentará a España y la República Checa entre el 4 y el 6 de diciembre. Barcelona, Málaga, Tenerife y Valencia competirán por ser el escenario. La junta directiva de la federación española se reunirá el próximo sábado para elegir la sede, que luego deberá obtener el definitivo visto bueno por parte de la internacional (ITF).
Tenerife, la única aspirante que se había ofrecido antes de ayer, el último día del plazo para hacerlo, propone el estadio Antonio Domínguez, de Arona, lo que obligaría a la federación a plantear un recurso ante la ITF si la eligiese, ya que está prohibido que la final sea al aire libre como desea el Cabildo. Barcelona oferta el Palau Sant Jordi, donde España ganó en 2000 el torneo por primera vez. Valencia, el Velódromo Luis Puig o la Feria de Muestras. Y Málaga, el Palacio de Deportes Martín Carpena o el estadio de atletismo Ciudad de Málaga. La doble propuesta de Valencia y Málaga responde a la necesidad de acoger a un mínimo de 12.000 espectadores. Conocedoras de la competencia, todas las candidatas, según la federación, han cubierto, "como mínimo", el canon de un millón de euros solicitado.
La junta directiva de la federación se reunirá el próximo sábado para elegir la sede
Madrid, no. Madrid, que nada más alcanzar España la final transmitió a través de políticos y federativos su interés en organizarla, siempre estuvo mirando de reojo a Copenhague, donde perdió el tren de los Juegos. La posibilidad de que fuera olímpica obligó a un cambio en el calendario. La federación debía elegir antes del 2 de octubre, precisamente cuando se votó la sucesora en 2016 de Londres 2012. Eso abría la posibilidad de que Madrid, de no obtener la Davis, acudiera a Dinamarca sin el respaldo del tenis: ¿cómo defender su proyecto olímpico si los propios españoles descartaban la Caja Mágica para el duelo decisivo? Así, la federación consiguió un aplazamiento hasta el día 10, aunque negó que tuviera que ver con la carrera olímpica. "Solemos pedir tiempo. Los pliegos de condiciones de estos eventos son muy complicados", explicaron desde su directiva.
José Luis Escañuela, el presidente, viaja hoy a Barcelona para estudiar las cuatro propuestas. Después hablará con Albert Costa, el seleccionador, y los tenistas. Es fácil prever sus preferencias: jugar a nivel del mar y sobre arcilla. Eso ya suponía un hándicap para Madrid debido a sus más de 600 metros de altura. En su contra también pesó el encarnizado enfrentamiento que se produjo en 2008 entre los jugadores y el anterior presidente, Pedro Muñoz, que rompió la promesa de escuchar sus preferencias y escogió la capital para las semifinales. A todo ello sólo hubo que sumarle la pérdida de los Juegos para que Madrid no presentara ayer candidatura alguna.
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