_
_
_
_
Reportaje:

Los 13 escudos de Carlos III

Hallado un tesoro con monedas de oro en Córdoba

Todavía se encuentran tesoros enterrados. En Córdoba acaban de descubrir uno. Pero, a diferencia de las leyendas y las novelas, no había ningún mapa en el que una equis marcase el lugar. Ha sido una excavación arqueológica, de las que se llevan a cabo en los alrededores de la Puerta del Puente Romano, en pleno casco histórico de la ciudad, la que ha permitido hallar 13 monedas de oro (escudos) de época de Carlos III, fechados entre 1776 y 1801. Las monedas se encontraban enterradas bajo una capa de cal y han permanecido en perfecto estado de conservación durante estos dos siglos.

El tesoro ha visto la luz cuando los arqueólogos, que trabajan gracias al convenio firmado entre la Gerencia Municipal de Urbanismo (GMU) y la Universidad de Córdoba (UCO), se encontraban estudiando los estratos que han dejado a la luz las obras de un nuevo colector, que pasa por el exterior de la antigua muralla. "En el sondeo número cuatro hemos hecho el hallazgo", recordaba ayer Enrique León, director de la intervención arqueológica. "En ese lugar se encontraba una rampa de acceso que iba desde la Puerta del Puente al embarcadero, también conocido como arrecife", continúa. Justo allí aparecieron las 13 monedas, depositadas juntas, sin continente alguno que las encerrase. "Pero está claro que las pusieron allí de manera intencionada", zanja el arqueólogo.

Un arqueólogo cree que pudieron ser escondidas por la invasión francesa

Y ahí viene la segunda parte de la historia. ¿Por qué enterrar junto al río 13 monedas de oro? "Por las fechas en las que nos movemos, podemos pensar que, ante la llegada de las tropas napoleónicas francesas del general Dupont, que saquearon la ciudad en julio 1808, esta persona decidiese esconder las monedas antes de que se las robasen", explica Enrique León.

"Creemos que la idea de esconder las monedas de los invasores franceses es una teoría factible y lógica. Pero nos sorprende el lugar por el que se optó para esconder el dinero, pues ese espacio era usado como vertedero de desechos orgánicos y de obra. Además, muy cerca de allí, dentro de las murallas, había mucha presencia de gente, por los comercios y tabernas que existían". El continuo aporte de tierra y basura, unido a lo concurrido del sitio, pudo hacer que la localización posterior del tesoro fuese casi imposible. "Lo cierto es que nunca se volvió a recoger", zanja el científico. ¿Las razones? Por el momento, cada cual deberá usar su imaginación.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_