_
_
_
_
_

El sindicalista del campo que demandó a su organización

Un juzgado niega despido improcedente al ex líder del SLG

Sin trabajo y sin derecho a percibir prestaciones por desempleo. Así se encuentra el que fuera uno de los principales impulsores del sindicalismo agrario gallego y delegado provincial en Lugo de Medio Rural durante el Gobierno bipartito, Emilio López Pérez, Milucho. El juzgado de lo social le acaba de denegar el despido improcedente y una indemnización de 30.000 euros que había demandado al Sindicato Labrego Galego (SLG). Muy lejos quedan los tiempos donde Milucho se vanagloriaba, micrófono en mano, de haber paralizado Galicia "por tierra, mar y aire" con una tractorada. Incluso como delegado provincial entregó un tractor a un alcalde y , evocando su pasado reivindicativo, preguntarle: "¿Dónde te lo cruzo?".

Sin embargo, su sentido del humor se vino abajo tras la derrota electoral del bipartito se presentó en la oficina del INEM y quiso tramitar la documentación para percibir el paro, tras varias legislaturas como parlamentario del BNG y 4 años como cabeza de Medio Rural en Lugo. "Está en situación de excedencia y no puede cobrar la prestación", le respondieron en la oficina de empleo. Entonces Milucho quiso reincorporarse al sindicato agrario y así se lo hizo saber al SLG mediante burofax. Pero en el sindicato le explicaron al INEM que no existía constancia de tal excedencia.

Desde ese momento, Milucho, se consideró despedido e inició un pleito para obtener tal reconocimiento del juzgado de lo social. El tribunal acaba de pronunciarse en contra de sus pretensiones por "inadecuación de procedimiento". La sentencia, que ayer dio a conocer el secretario de Relacións Laborais del SLG, Manuel Docampo, deja abierta la posibilidad a que López Pérez se pueda reintegrar a la vida laboral del SLG cuando exista una vacante. El juzgado sí ha reconocido, sin embargo, la existencia de una excedencia voluntaria. El dictamen judicial puede ser recurrido ante el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia.

Docampo considera que la sentencia es "clara y rotunda" y evidencia que el pleito "lo ganó el SLG". Y aunque reconoció que López Pérez fue un dirigente destacado, que desde 1993 "no existe relación del sindicato con el demandante ni como colaborador, ni como empleado, ni como afiliado". Docampo no dudó en aclarar que en lo personal no existe nada en contra de Emilio López Pérez, quien intentó que se le reconociera una antigüedad laboral desde 1979. Desde el sindicato recuerdan que, durante buena parte de ese periodo el propio demandante fue el máximo responsable de la organización así que, apuntó Manuel Docampo, "si hubo irregularidades a lo largo de eópez Pérez] lo explique".

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_