Vigilantes de madrugada

Los vecinos de la barriada de Hijate, en el municipio almeriense de Alcóntar (611 habitantes), vivieron la semana pasada tres robos consecutivos en diversos comercios. Hace tiempo que peinan las inmediaciones de sus establecimientos de madrugada para evitar nuevos atracos.

El último, cometido en el restaurante Lloretma, acabó con el ingreso en el hospital de uno de sus propietarios, al que golpearon en la cabeza antes de llevarse los ingresos del día. El alcalde del municipio, Antonio Salas, relató que encontraron al gerente del restaurante tirado en el suelo en una de las batidas que los vecinos realizan para asegurarse de que sus comercios no han sido desvalijados. "Los ánimos están que saltan por los aires. El jueves robaron en mi secadero de jamones y los daños se estiman entre 15.000 y 20.000 euros. Esa misma noche intentaron también robar en el restaurante Lloretma pero les saltó la alarma y volvieron el viernes", indicó el primer edil.

Los ladrones han robado hasta 1.000 litros de gasoil en una tienda

El robo del miércoles consistió en la sustracción de 1.000 litros de gasoil en una tienda de compraventa de tractores. Según el alcalde, la comarca padece desde hace meses este tipo de robos. "Hace 15 días, le robaron la gasolina a otro camión. La delincuencia se ha incrementado de manera alarmante", sostiene.

Salas se reunió ayer con el subdelegado del Gobierno en Almería, Andrés Heras, quien le transmitió su preocupación y apoyo por los sucesos. "El apoyo del subdelegado ha sido total", indicó el alcalde tras la reunión. Está previsto que el alcalde de Alcóntar mantenga hoy otra reunión con miembros de la Guardia Civil en Hijate. Mientras tanto, él y otros vecinos del pueblo seguirán con la vigilancia personal de sus negocios.