Dos detenidos por el robo de fotos y vídeos a mujeres vía Internet
La red global puede convertirse en las manos equivocadas en una ventana indiscreta, abierta a la invasión de la intimidad. La Policía Nacional de Alicante detuvo entre el jueves y el viernes a un presunto hacker y su cómplice acusados de tener en sus ordenadores más de 200 cuentas de correo electrónico de mujeres, principalmente jóvenes, y más de 300 carpetas con archivos de fotografía y de vídeos íntimos y de carácter sexual de otras tantas. Todo el material habría sido captado sin el conocimiento de las víctimas.
La investigación, desarrollada por el Grupo de Delitos Tecnológicos de la Brigada Provincial de Policía Judicial se inició después de que una persona interpusiera el pasado mes de enero una denuncia en la que aseguraba que unos desconocidos habían accedido a su ordenador mediante un programa de los denominados troyanos para, usurpando su identidad y utilizando su dirección de correo electrónico, enviar e-mails "molestos y desagradables" a su novia "con la intención de hacerle pensar que le había sido infiel con otra mujer".
La pista llevó a los agentes a localizar la dirección IP (numeración de protocolo de acceso a Internet) del ordenador desde el que se enviaron los mencionados correos electrónicos, lo que permitió identificar finalmente al titular del mismo. Se trata de un joven alicantino de 28 años, R.LL.C., de profesión economista y técnico informático.
Las pesquisas, igualmente, llevaron a la detención de un segundo varón, J.F.A.F., de 43 años, amigo del primer arrestado y que había contactado con él para que accediera al ordenador de su entonces pareja sentimental, sin su consentimiento, para mediante la utilización del programa messenger conocer las conversaciones y contenido de los mensajes que la mujer mantenía.
En el registro domiciliario, los agentes incautaron dos ordenadores portátiles y una memoria USB de 4GB con más de 200 cuentas de correo electrónico de mujeres y más de 300 carpetas con archivos fotográficos y vídeos íntimos de carácter sexual de otras tantas, a las que "habrían invadido su intimidad, sin que las víctimas se hayan percatado", explicó la Policía en su nota. Los detenidos, sin antecedentes penales, están acusados de delitos contra el honor, la intimidad personal y la propia imagen, así como de usurpación de estado civil.
