Los ingresos del 73% de las empresas cayeron durante el primer semestre

El virus del pesimismo se ha inoculado en la empresa gallega y apenas hay síntomas de que frene su avance. El Barómetro elaborado por la consultora Deloitte para EL PAÍS arroja un balance para olvidar del primer semestre, frente a unas previsiones menos pesimistas hasta final de 2009. De la intensidad de la crisis en estos seis primeros meses dan cuenta datos demoledores, entre ellos que el 72,7% de las compañías gallegas consultadas admiten haber recortado sus ingresos con respecto al segundo semestre de 2008. Los datos de empleo no son mucho mejores: más de ocho de cada diez empresas aseguran que no aumentarán sus plantillas este año, y el resto avanza que eliminará puestos de trabajo.

Sólo el 27% de los encuestados prevén mejorar resultados hasta final de año

Una de cada cuatro compañías planea recortar su plantilla en 2009

De que las cosas no van del todo bien en Galicia con respecto al resto de España dice mucho la cifra de negocio de las compañías. Por una razón bien sencilla: del conjunto de las empresas españolas, sólo seis de cada diez reconocen haber recortado sus ingresos en este semestre, y algo más de 25 de cada 100 aseguran que su facturación ha mejorado. Es decir, presentan mejores registros que las firmas gallegas. La encuesta elaboradaza por Deloitte, que periódicamente publica EL PAÍS, ha sido realizada sobre una muestra total de 258 compañías en toda España, que abarca todos los sectores de la economía y cuya facturación supera, conjuntamente, el billón de euros.

Los recurrentes brotes verdes comienzan a mostrar color para la segunda mitad del año, aunque también vuelven a asomar las diferencias con respecto al resto de España. Son menos las empresas gallegas (un 27,2%) que prevén que sus ingresos disminuirán de aquí a final de año con respecto al primer semestre, frente al 30,4% a escala española. Sin embargo, de acuerdo con el Barómetro, las que consideran que su cifra de negocio mejorará, con un 36,4%, se sitúa dos puntos por debajo de la media española. Para el conjunto del año, y sobre el cierre de 2008, sólo 27 de cada 100 empresas gallegas da por seguro que sus ingresos mejorarán, mientras el resto cree que se mantendrán iguales o empeorarán.

En cuanto a las exportaciones, un trampolín en que el habitualmente Galicia se mueve mejor que España por una vocación internacional más acusada, las previsiones de las compañías autóctonas se mueven entre lo malo y lo peor. De hecho, ninguno de los consultados muestra optimismo en este sentido: un 57,1% de los encuestados considera que sus ventas al exterior permanecerán iguales, mientras que el 42,9% creen que disminuirán.

El empleo, una suerte de cenicienta siempre que el Barómetro aborda las previsiones de las empresas, también se tiñe de una negra sombra en Galicia, a pesar de que los últimos registros oficiales del paro arrojen cierto optimismo en la comunidad. Negativo es el saldo del primer semestre y negativas son las previsiones, pero con grandes salvedades en comparación con la medida nacional. Si durante la primera mitad del año han sido tres de cada diez consultados en Galicia los que reconocen haber recortado sus plantillas y siete los que las han congelado, en España estos registros se sitúan en el 52,3% y 30,7%, lo que permite dibujar sobre el mapa de los números ese tan manido plus de resistencia, vinculado a los menores efectos de la crisis inmobiliaria en esta comunidad.

La segunda mitad del año también se presenta con atisbos de mejora en cuanto al escenario laboral. Sobre todo teniendo en cuenta los registros que apuntan el resto de empresas españolas. Si en Galicia casi nueve de cada diez mantendrán sin nuevas contrataciones su contingente laboral, en España ese porcentaje baja hasta el 46,5%, mientras que dicen que recortarán empleos un 41,2% de los consultados y sólo el 12,3% aseguran que lo incrementarán. En Galicia, sin embargo, ninguna empresa apunta a que creará puestos de trabajo este año, frente a un 11,1% que los dan por seguro que los destruirán.

Los empresarios gallegos recurrirán a lo fácil, según adelantan los datos de la encuesta. Un 25% recortará empleos eventuales, frente a sólo un 10% que se muestra partidario de hacerlo con la plantilla fija. Seis de cada diez empresas consultadas admiten que sus beneficios antes de impuestos en el primer semestre han caído, frente a un 30% que aseguran haberlos incrementado. En España, la situación ha ido pareja. Sólo tres de cada diez empresas encuestadas han aumentado sus márgenes finales. El optimismo en cuanto a la evolución de los beneficios muestra síntomas similares. El 60% afirma que su beneficio antes de impuestos (BAI) aumentará. El resto asegura que se verá recortado en el segundo semestre. Y de aquí a final del ejercicio, son el 40% los que prevén incrementar sus inversiones, frente a un 60% que las mantendrá o recortará. En esta primera mitad del año, sólo tres de cada diez han incrementado sus inversiones.