Un pequeño escalón menos

El metro se agranda bajo la plaza de Castilla. Uno de sus vestíbulos más antiguos será 10 veces mayor en otoño. Tendrá 10 ascensores más y 17 escaleras mecánicas distribuidas en nuevas y enormes salas. Todo para que lleguen al andén los viajeros en sillas de ruedas o quienes no pueden bajar escaleras. Metro ha invertido 94 millones para remodelar estaciones y, de paso, facilitar el tránsito a las personas con dificultades de movilidad en seis estaciones a partir del próximo otoño. Pero queda mucho por hacer. Dos de cada cinco paradas del suburbano aún no son accesibles.

El nuevo consejero delegado de Metro, Ignacio González Velayos, aseguró ayer en un recorrido con periodistas por las obras de ampliación en Plaza de Castilla que "algunas de las estaciones más antiguas" serán más accesibles "en tan sólo unos meses". Se refería a Pacífico (líneas 1 y 6), Carpetana (línea 6), Sainz de Baranda (6 y 9), Ópera (2, 5 y Ramal) y Argüelles (3, 4 y 6). Todas están en obras para ampliar pasillos, andenes o instalaciones y, de paso, incluir rampas, elevadores y escaleras mecánicas. Cuatro estarán listas antes de que acabe este año. Otras dos (Ópera y Argüelles) terminarán la remodelación para finales de 2010.

No hay fecha ni presupuesto fijos para eliminar todas las barreras

Queda pendiente algo menos del 40% de las paradas de la red, según estimaciones facilitadas por Metro, que no ofrece el dato exacto de cuántas de las 293 paradas tienen ascensores para llegar a los andenes y cuántas no. Una portavoz explicó que la intención de la empresa pública es seguir adaptando paradas, pero no hay una fecha fijada ni un presupuesto concreto comprometido para el centenar de estaciones a las que aún no se puede entrar o salir en silla de ruedas.

En accesibilidad, Madrid está por detrás de Barcelona. El 70% de las 123 estaciones de la red de Transportes Metropolitanos de Barcelona (TMB) están adaptadas. Son un total de 86. De las 15 que hay actualmente en obras para instalar ascensores, cinco estarán listas antes de que acabe el año, según datos facilitados por la Consejería de Política Territorial de la Generalitat de Cataluña.

La inversión más alta en las remodelaciones actuales de Madrid corresponde a la estación de Plaza de Castilla, con 19 millones de euros financiados al 50% por la Comunidad y el Ayuntamiento de Madrid, como en el resto de remodelaciones. La obra incluye la ampliación de dos vestíbulos y la construcción de dos más. Pasará de 210 metros cuadrados de superficie a 1.400. Para ampliar pasillos, algunos de los comercios instalados en el corredor que conduce a las líneas 9 y 10 se llevarán a la parte nueva.

En la estación de Pacífico, las obras servirán para instalar tres ascensores y cuatro rampas. Además, la ampliación incluye un nuevo centro de control para coordinar la seguridad de las líneas 1, 6 y 11. Costará 17,5 millones de euros.

En Carpetana, Metro construye un recinto para cuartos técnicos con equipos que darán servicio a toda la línea circular. Incluirá seis ascensores. La obra acabará en invierno de 2009, tras meses de retrasos por un hallazgo arqueológico. En mayo de 2008, durante las excavaciones, se encontró un yacimiento con más de 1.500 piezas fósiles de 13 millones de años de antigüedad.

La remodelación de la estación de Ópera, que terminará en octubre de 2010, incluirá tres ascensores y ocho escaleras mecánicas más. Metro construye un nuevo vestíbulo ocho veces más grande que el actual. Las otras dos paradas previstas, Sainz de Baranda y Argüelles, también incluirán más rampas y accesos.