Hernández propone a la oposición un pacto sobre territorio, litoral e infraestructuras

Después de desplegar un rosario de planes y proyectos, el conselleiro Agustín Hernández lanzó el guante a la oposición, a la que propuso un pacto por el territorio. En su primera intervención en el Parlamento para explicar las líneas generales de su amplio departamento, que abarca Medio Ambiente, Infraestructuras y Territorio, el superconselleiro expuso su oferta de dejar fuera del debate político tres documentos: el Plan del Litoral, las Directrices de Ordenación del Territorio y el Plan de Infraestructuras del Transporte.

De los dos primeros, afirmó que pretende dejarlos "en condición de ser aprobados" este año. El tercero, relativo a las comunicaciones ferroviarias y por carretera, será presentado en julio y tendrá como horizonte temporal el año 2015. La oferta del pacto no suscitó entusiasmo alguno en la oposición. La diputada socialista Mar Barcón pidió a Hernández que amplíe el acuerdo a decisiones polémicas de su departamento que le reclamó dejar sin efecto. La nacionalista Teresa Táboas obvió la propuesta.

Entre otros anuncios, Hernández dejó el de un plan de residuos sólidos urbanos, el de una ayuda directa de 100 euros para colectivos con especiales dificultades para acceder a una vivienda y el de crear la figura de la vivienda libre de precio concertado, pensada para facilitar la salida al mercado del excedente de viviendas en Galicia. Respecto a las infraestructuras, prometió una "reformulación total" de la AP-9 si consigue su traspaso a la comunidad autónoma, "con un nuevo diseño, nuevos enlaces y aumento de la capacidad", aunque no se refirió a la ampliación anunciada por el anterior Gobierno. También se comprometió a presentar este año una propuesta para reducir los peajes en las autopistas gallegas.

Hernández, por otra parte, reiteró su compromiso con la depuradora de Vigo, pero acusó a la oposición de dificultar las negociaciones con el Gobierno para financiar los 115 millones que le corresponden a la Xunta. Barcón y Táboas enmarcaron el rechazo de la consellería a firmar este convenio en el "revisionismo" de Hernández sobre las decisiones del bipartito.