El PSC allana el camino para pactar la financiación autonómica

El discurso de los socialistas catalanes sobre la financiación autonómica ha dado un vuelco en sólo una semana. Hace siete días, el viceprimer secretario y portavoz del partido, Miquel Iceta, apuntaba a la falta de acuerdo con el Gobierno como una de las causas de la alta abstención en las elecciones europeas en Cataluña y de la sangría de 205.000 votos del PSC. Ayer, Iceta aseguró que el acuerdo "está cada vez más cerca", confió en que la oferta del Gobierno pueda mejorar algo, y vaticinó que su "rendimiento" será "megaespectacular".

Iceta empleó este término en referencia a los 250 millones de euros anuales que CiU logró en 2001 en su acuerdo de financiación con el Gobierno de José María Aznar. "Si entonces Artur Mas consiguió 250 millones y lo calificó de histórico, 1.800 sería incalificable: intergaláctico, estratosférico, megaespectacular", afirmó. El portavoz del PSC sacó esta cifra de calcular el 20% de los 9.000 millones adicionales que el Ministerio de Economía propone a todas las comunidades para cerrar el nuevo modelo de financiación.

La Generalitat juzgó insuficiente una cifra similar hace tres meses

No está escrito en ningún lugar que Cataluña deba obtener exactamente el 20% de estos 9.000 millones. Pero es una cifra que facilitaría el acuerdo con el Gobierno. Según la Generalitat, Economía ofreció en marzo asignar a Cataluña 1.200 millones el primer año, 1.600 en el segundo, y alcanzar los 2.000 en el tercero. Las cifras -al menos las públicas- no se han movido ni un milímetro sobre las que el propio PSC calificó entonces de insuficientes.

El cambio de discurso del partido se enmarca en un momento en que crecen las voces internas que llaman a rebajar el nivel de enfrentamiento con el PSOE. En su comparecencia posterior a la ejecutiva de los socialistas catalanes, Iceta llegó a incluir el acuerdo "megaespectacular" en la "semana fantástica" que, asegura, arranca hoy con la inauguración de la nueva Terminal 1 del aeropuerto de El Prat. "Estamos convencidos de que llegaremos a un acuerdo que honre al Estatuto, cada día estamos más cerca", dijo el portavoz del PSC.

Por la tarde, el presidente catalán, José Montilla, eludió la financiación, pero recuperó el perfil reivindicativo al asegurar que si el Constitucional modifica el Estatuto se corre el riesgo de "romper la convivencia" en Cataluña.

El vuelco en el discurso del PSC coincidió, además, con la publicación de las cuentas del sistema en 2007, cuyo resultado respalda algunos de los argumentos que esgrime el consejero de Economía catalán, Antoni Castells, para exigir más de los 2.000 millones ofrecidos por el Gobierno.

Las comunidades con más dinamismo económico y demográfico (Madrid, Baleares, Cataluña o Comunidad Valenciana) fueron las que menos se beneficiaron del aumento de dinero distribuido en 2007 (ver gráfico). La recaudación de impuestos cedidos al 100%, con más peso en estas comunidades, cayó ligeramente. Las autonomías que dependen más de la transferencia estatal salen mejor paradas: en Asturias, que pierde población, fue donde más aumentó el dinero percibido del sistema (un 7%).

Además, la diferencia entre lo que reciben las comunidades antes y después de aplicar la transferencia estatal, se extrema. Cuando sólo se tiene en cuenta la recaudación de impuestos, el dinero por habitante recibido por Cataluña se sitúa en 120% de la media (Extremadura, 64%). Con la corrección del fondo estatal se queda en el 99% de la media (Extremadura, 114%).

Con las negociaciones en su tramo final, otras autonomías toman posiciones. "Si Andalucía no recibe lo que le corresponde, dirá no", advirtió el presidente de la Junta, José Antonio Griñán. "Madrid ha perdido 3.000 millones desde 2002 porque no se reconoce su crecimiento demográfico", adujo la Consejería de Economía madrileña en un comunicado.