El metal en huelga corta el tráfico y bloquea bancos
Los sindicatos arengan para resistir un "largo conflicto de desgaste"
Esporádicos cortes de tráfico y el bloqueo de las cuatro sedes bancarias que ocupan las esquinas del nudo urbano más céntrico de Vigo fueron las notas principales de la primera jornada de huelga del sector del metal de Pontevedra, en la que los sindicatos arengaron a los trabajadores para afrontar un conflicto que, según presumen, va para largo. La propia patronal no cree que se avance nada en las negociaciones del convenio en lo que queda de mes. Los sindicatos anuncian para la jornada de huelga de hoy "acciones sorpresa".
La huelga ha conseguido revitalizar la unidad de acción de los tres sindicatos mayoritarios (CIG, CC OO y UGT), que reclaman la negociación de un convenio anual frente a los dos años de vigencia que oferta la patronal. Esa diferencia ya ha bastado para impedir que ambas partes se sienten a la mesa. La delegada de la Xunta en Vigo, Lucía Molares, se reunió el martes con cada una de ellas,por separado, para proponer el arbitraje de un mediador. Los sindicatos lo aceptan, como todo lo que pueda conducir a restaurar el diálogo.
"Este conflicto pudo evitarse", aseguraba ayer Ramón Sarmiento, de CC OO, que atribuye a la patronal -"a los hooligans", precisó, "al sector duro que está imponiendo sus criterios"- el planteamiento de convertirlo en un "conflicto de desgaste sindical". En el mismo sentido se pronunció Diego Atanes, de UGT, para quien la patronal persigue "la destrucción de la unidad de acción". "La Administración tiene que pedir responsabilidades a los empresarios", añadió. "La patronal acaba de quitarse la máscara", dijo Miguel Anxo Malvido, de CIG, quien reclamó una participación más activa de la Delegación de Trabajo en la solución del conflicto.
El metal emplea a más de 20.000 trabajadores en la provincia y la huelga fue generalizada, según los sindicatos, que denuncian las presiones "con amenazas de despido" a que están siendo sometidas las plantillas de "ciertas empresas" pese a la legalidad de la huelga.
La jornada comenzó con asambleas en los centros de trabajo. Después se prodigaron cortes de tráfico en distintas vías, sobre todo en las paralelas a la costa, con neumáticos a los que prendieron fuego, como en Beiramar, o a cuerpo gentil. El bloqueo durante una media hora de los cuatro bancos del cruce de las calles Colón con Policarpo Sanz y García Barbón precedió a una asamblea en la Praza do Rei, en la que participaron unos 2.000 huelguistas, antes de volver a cortar el tráfico por la zona de Praza de América.
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