Aprovechar el momento
El BBVA no ha tenido que ampliar capital pero puede cambiar de opinión
El BBVA es uno de los pocos bancos mundiales que no ha tenido que ampliar capital durante la crisis financiera. El banco español era objeto de atención el año pasado después de que su rival, el Santander, efectuara una ampliación de capital de 7.200 millones de euros. El BBVA sigue insistiendo en que no necesita dinero. Pero dada la recuperación de los mercados bursátiles -las acciones del BBVA están en el punto más alto de los últimos cuatro meses y cotiza a una prima sobre otros bancos similares- tal vez le vendría bien reconsiderarlo.
El banco publicaba a finales de marzo que su coeficiente de capital social se encuentra en el 6,4%. Pero si tenemos en cuenta el aumento de participación en China Citic Bank, su coeficiente de capital cae al 5,8%, según cálculos de Citigroup, uno de los más bajos de Europa.
Es verdad que el BBVA no necesita un gran colchón. Al contrario que sus rivales europeos, sigue ganando dinero y tiene provisiones genéricas para absorber las pérdidas por cuentas incobrables. Es principalmente un banco comercial, sin exposición a las tóxicas estructuras extracontables que provocaron el caos en el balance de situación de sus rivales. Y a diferencia del Santander, no ha realizado grandes adquisiciones en los pasados dos años.
El BBVA dice que este año su actividad normal debería producir un aumento de 80 puntos básicos en su ratio de core capital (el capital de máxima calidad en relación con el riesgo asumido).
Todo eso está bien, siempre que las cosas no empeoren mucho. Pero los tres principales mercados del BBVA -España, México y Estados Unidos- están sumidos en la recesión. La morosidad en España aumenta a gran rapidez, y las provisiones están afectando también a los beneficios mexicanos.
Ahora que los mercados bursátiles están subiendo parece un buen momento para decidirse. Una ampliación de capital de entre 2.000 y 3.000 euros situaría su ratio de core capital por encima del 7%. El BBVA podría realizar una emisión de acciones o una colocación acelerada. Esta última podría hacerse con rapidez, para aprovechar el actual estado de ánimo del mercado. Así es como el BBVA llevó a cabo su última ampliación de capital, en 2006.
En aquel momento, el banco afirmaba también que no tenía intención de realizar grandes adquisiciones y, sin embargo, tres meses después anunciaba la compra en Estados Unidos de Compass, por 9.600 millones de dólares, junto con una segunda emisión de capital. Éste podría ser un buen momento para volver a cambiar de opinión.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.