Montilla prepara al PSC para dar el 'sí' a un acuerdo de financiación
"Os pido la confianza cuando el Gobierno catalán diga sí". De esta forma, se dirigió ayer a las bases de su partido el presidente de la Generalitat y primer secretario de los socialistas catalanes, José Montilla, convencido de que habrá pacto sobre la financiación autonómica. Montilla, arropado en un mitin por cerca de 3.000 militantes, agradeció la confianza obtenida de su partido para rechazar las ofertas que hasta ahora ha hecho el Gobierno central a la Generalitat, pero dio por hecho que esta legislatura será la del pacto financiero y pidió que la confianza en él se mantenga. "Si el Gobierno [catalán] dice sí, sin duda será porque es un buen acuerdo".
No fue una afirmación baladí. Los contactos a todos los niveles entre Gobierno central y Generalitat en los últimos 10 días han sacado la financiación del callejón sin salida en la que la dejó el ex ministro de Economía Pedro Solbes. No hay pacto, o al menos en eso insisten los miembros del Gobierno catalán, pero las negociaciones avanzan y ahora la dirección del PSC quiere evitar que algún sector del partido, por pequeño o residual que sea, se desmarque a última hora de un eventual pacto. Bastantes problemas auguran ya los dirigentes socialistas para conseguir que Esquerra Republicana acepte el acuerdo que puedan alcanzar el consejero de Economía, Antoni Castells, y la vicepresidenta económica, Elena Salgado. Sin ir más lejos, Esquerra Republicana volvió a insistir ayer en que el pacto está lejos. "O cambian mucho las cosas o no habrá acuerdo", dijo su presidente, Joan Puigcercós.
"O cambian mucho las cosas o no habrá acuerdo", replica Puigcercós
Mientras ERC seguía por la vía más escéptica, en el mitin que los socialistas celebraron en la Fira de Barcelona, todo fueron cantos alentando al pacto. Hasta la ministra de Defensa, Carme Chacón, muy poco proclive a mojarse en los conflictos que mantienen el PSOE Y el PSC, dio por hecho que habrá acuerdo. La ministra, que fue cabeza de lista del PSC en las elecciones generales, pidió "paciencia" para que la Generalitat y el Gobierno lleguen a un acuerdo, pero auguró que Montilla logrará el "mejor" pacto que haya tenido Cataluña.
El presidente de la Generalitat aceptó que ha llegado "la hora decisiva" de la financiación. Recordó que la firmeza de él y del consejero de Economía, Antoni Castells, ha evitado aceptar acuerdos con el Gobierno central que, si bien habrían ofrecido mejores resultados que los logrados por Convergència i Unió y el Partido Popular, no serían suficientes para cubrir las necesidades de Cataluña.El Gobierno catalán asegura que el modelo pactado por José María Aznar y Jordi Pujol sólo aportó 251 millones extras a la Generalitat en 2002, su primer año de aplicación. "Si nos conformásemos con acuerdos como el de 2001 hace tiempo que lo tendríamos y podríamos decir que hemos conseguido cinco o seis veces más que Artur Mas". Pero dicho esto, Montilla pidió de nuevo la confianza para dar el sí cuando él decida que hay un acuerdo aceptable.
No obstante, el acto de ayer no pretendía centrarse en la financiación, sino todo lo contrario. El PSC buscaba redibujar su perfil en el Gobierno pasado el ecuador de la legislatura. De ahí que todos los oradores destacaran los logros del Gobierno catalán y en especial los de los consejeros socialistas. Montilla aseguró que la apuesta por el tripartito con Esquerra Republicana e Iniciativa-Esquerra Unida no es un accidente en el camino por mucho que moleste a algunos sectores del PSOE. "Nuestro horizonte no es 2012 o 2014; trabajamos con la mirada puesta en 2020".
Los socialistas buscaron en todo momento potenciar el perfil de Montilla sin molestar excesivamente a sus socios. De ahí que el presidente hablara en todos los casos de Gobierno "catalanista de izquierda" y recordara que su obra es fruto del pacto de Entesa. El PSC da por hecho que sus posibilidades de mantener la presidencia de la Generalitat pasan por los pactos y sus dirigentes no quieren avanzar a costa de comerse a sus socios, sino de arañar votos a los partidos de la oposición.
Estreno de Badia
La apuesta de largo recorrido de Montilla fue corroborada por Chacón y también por el alcalde Jordi Hereu, quien destacó la "fuerza de los hechos". También ensalzó la visión a "largo plazo" con la que trabaja el tripartito, que contrapuso a la táctica del "peix al cove" [pájaro en mano] de CiU.
El acto de ayer también sirvió para que la candidata a las elecciones europeas, Maria Badia, se fogueara ante la campaña. Las escasas dotes mitineras de Badia no preocupan a la dirección del PSC, que destacan su larga experiencia en el Parlamento Europeo frente a unos candidatos de CiU y ERC nada bregados en esta labor. Badia intentó llevar el debate a la política europea, pero no dejó de recordar que algunos de los socios de CiU en el europarlamento han puesto palos en las ruedas a la oficialidad del catalán en Europa.
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