Fiscalía y Defensor investigan la muerte de la niña tutelada

El Juzgado de Instrucción número 26 de Madrid y las fiscalías de Guadalajara y Ciudad Real ya han comenzado las diligencias legales pertinentes tras el fallecimiento de una menor -S. G., de 14 años- internada en el centro de menores Casa Joven de Azuqueca de Henares (Guadalajara). También el Defensor del Pueblo y la Junta de Castilla-La Mancha han iniciado sendas investigaciones para aclarar la muerte de la niña tras saltar en marcha de una furgoneta que la trasladaba al centro terapéutico de protección. Regresaba de las vacaciones de Semana Santa. La pequeña, que llevaba ingresada en esa residencia desde julio de 2008, saltó del vehículo a la altura de San Fernando de Henares el domingo 11 de abril. Fue ingresada en la UCI del hospital del Niño Jesús y falleció una semana después.

Los responsables de los menores del Gobierno manchego advierten de que estudiarán las posibles negligencias de Casa Joven y que, incluso, podrían rescindir la concesión a la empresa adjudicataria, la Fundación O'Belén, aunque, dicen, respetan "la presunción de inocencia".

Esta compañía regenta varios de los centros peor parados en un muy desfavorable informe del Defensor del Pueblo hecho público en febrero pasado. En otra residencia gestionada por O'Belén, Picón de Jarama, situada en Paracuellos, se ahorcó con su pijama un menor marroquí de 12 años. Supuestamente, porque le dejaron el último para cenar. Además, otro menor se intentó quitar la vida, aunque se recuperó en el hospital 12 de Octubre.

También, dicen en la Junta de Castilla-La Mancha, están estudiando y ya han recomendado algunas variaciones en el régimen interno de dicha residencia. Algunos niños y ex trabajadores denunciaron retenciones mecánicas, inmovilizaciones innecesariamente largas, prohibiciones arbitrarias o falta de privacidad en las comunicaciones. Entre las faltas graves, por ejemplo, estaba la de criticar al centro cuando se hablaba con alguien de fuera.

Los portavoces de la fundación han mostrado su pesar por el suceso y han reiterado que la menor "no había tenido nunca ningún problema dentro del centro". El educador que acompañaba a S. G. y a otros seis niños en la furgoneta que les trasladaba al centro no ha acudido a trabajar tras la muerte de la menor, según informan fuentes cercanas al personal laboral de Casa Joven.

La niña, cuyos padres están en prisión, pasó a estar tutelada por la Comunidad de Castilla-La Mancha en mayo de 2007. Su familia, muy numerosa, vive en Ciudad Real. De entre todos ellos, su tía es quien ha estado más en contacto con las autoridades. La menor sufría algunos trastornos de conducta graves, según fuentes cercanas al personal del centro. Los padres y otros familiares han estado en el hospital madrileño acompañados de cargos de la Consejería de Bienestar de Castilla-La Mancha.

Ayer se le practicó la autopsia al cadáver de la menor en el Instituto Anatómico Forense de Madrid y hoy por la tarde será enterrada en el cementerio de su ciudad natal.