Feijóo: "No cederé ante otras comunidades del PP sobre la financiación"

Obsesionado con la crisis desde que ganó las elecciones el 1 de marzo, Alberto Núñez Feijóo ha escuchado durante este último mes a los principales sectores económicos sin recibir "una buena noticia". Su rebosante agenda en busca del Gobierno a su medida que anunciará hoy lo obligó a comer de bocadillo varias veces esta semana. Hasta ayer, que llegó su día grande.

El Parlamento lo invistió presidente en una solemne sesión con la plana mayor del PP como testigo: su presidente, Mariano Rajoy; la número dos, María Dolores de Cospedal; el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, y la presidenta madrileña, Esperanza Aguirre. Luego, Feijóo desafió a la lluvia -que respetó su primer día- con un acto sobrio en la Plaza del Obradoiro, a la que ocho años después volvieron las gaitas -sólo 60, lejos de las 6.000 que contrataba Fraga para sus tomas de posesión- de la Real Banda de la Diputación de Ourense.

Tres años y medio después, hoy regresará a la Xunta -donde ya ejerció como vicepresidente primero- "para abandonar las siglas" de su partido y designar a los nueve conselleiros que junto a Alfonso Rueda, titular de Presidencia, conformarán su Gabinete. En declaraciones a EL PAÍS, Feijóo avanza rebajas fiscales a las rentas más bajas, un nuevo decreto del gallego en la educación "que permita escuchar a los padres", aunque luego sea la Xunta quien decida; y una revisión a fondo del concurso eólico, la mayor adjudicación pública de la autonomía, para "adaptarlo a la ley".

De paso, el presidente avanza que sus socios en el debate de financiación serán los mismos que los de Emilio Pérez Touriño. Porque "los intereses de Galicia no han cambiado, sólo su Gobierno". "Que no se preocupe el BNG ni el PSOE, no voy a ceder en el PP porque haya otras comunidades de mi partido con otros intereses. Lo primero es Galicia", anuncia. En clave interna, afirma que su histórica victoria sólo tiene dos padres: "El PP de Galicia y Mariano Rajoy".