ETA eleva la cuantía de su extorsión por carta a los empresarios navarros
La patronal denuncia que la presión no cesa y ya les exigen hasta 400.000 euros
ETA ha elevado la cuantía de su extorsión económica a numerosos empresarios navarros, a quienes ha llegado a exigir por carta entre 100.000 y 400.000 euros. Como referencia, hasta ahora la exigencia del denominado impuesto revolucionario oscilaba entre 20.000 y 60.000 euros. Este inquietante chantaje fue denunciado ayer por el presidente de la patronal navarra, José Manuel Ayesa, quien confirmó, además, un aumento del número de extorsionados durante los dos últimos meses. Para Ayesa, la extorsión en el País Vasco y Navarra "no ha cesado en ningún momento desde hace muchísimos años", aunque admite que "en unas etapas se intensifique más que en otras y ahora estamos viviendo un momento en el que se intensifican".
El presidente de los empresarios de Navarra lamenta que "los envíos" de cartas de extorsión "son continuos" y ya no puede hablarse de "nuevas remesas" puesto que, añade, "no hay una sola semana" en la que algún empresario "no haya recibido" la amenaza de pago. Eso sí, Ayesa recuerda que "no todos los empresarios" denuncian la exigencia del impuesto revolucionario por parte de ETA y así se hace "difícil" conocer el número de "extorsionados". No obstante, destacó que "cada vez son menos los empresarios que sucumben ante las amenazas".
Para el presidente de la patronal, a esta oleada extorsionadora contribuye "la falta de financiación que acusa la banda por otros canales y la ilegalización de los partidos políticos". "A ETA no le queda otra opción que los empresarios al no contar con cargos públicos que podrían derivar ingresos".
Precisamente esta situación denunciada en el empresariado navarro viene a coincidir con unos momentos de nula actividad terrorista de ETA, inmersa en un debate interno propiciado sobre todo desde sectores de sus propios presos, aunque en su último comunicado con motivo del Aberri Eguna (Día de la Patria Vasca) centró sus amenazas en Patxi López y su futuro gobierno.
Mientras, la presunta etarra Itxaso Legorburu Medinabeitia, detenida el pasado miércoles en Mézières-en-Brenne (Francia) fue trasladada ayer a París, donde fue interrogada antes de decidir si pasa o no a disposición judicial.
La Guardia Civil completó en la noche del jueves el registro de un piso ubicado en Orio (Guipúzcoa) a nombre de la detenida, que concurrió como candidata de ANV a las elecciones locales de 2007 en el País Vasco.
Legorburu fue detenida cuando intentaba robar un vehículo junto a un hombre, que consiguió darse a la fuga cuando fueron sorprendidos por miembros de la Gendarmería, alertados por el dueño de una armería próxima.
El supuesto miembro de ETA que acompañaba a Legorburu emprendió entonces una fuga a pie por el campo durante siete kilómetros antes de apoderarse de una furgoneta. Las fuerzas policiales francesas mantienen el operativo de búsqueda, aunque sin la intensidad de las primeras horas.
