"Esta plantilla no puede estar donde está"

Francisco Paco Chaparro fue destituido anoche como técnico del Real Betis, cargo en el que le sustituirá Josep María Nogués, hasta ahora técnico del filial, que renovará automáticamente su contrato al frente del primer equipo si consigue la permanencia.

"El Real Betis quiere manifestar su agradecimiento a Francisco Chaparro por su dedicación al club y le desea suerte para el futuro", indicó el conjunto andaluz en un breve comunicado publicado en su página web, en la que no se hacía referencia a la delicada situación del equipo: el Betis marcha decimosexto en el campeonato de Liga con 31 puntos, a sólo uno de los puestos que llevan al descenso, que ahora ocupan Recreativo, Numancia y Espanyol. En la última jornada, además, el equipo acabó empatando a tres goles en casa con el Numancia, un rival directo, cuando dominaba el encuentro y el marcador (3-2) minutos antes del final.

"Cuando no hay resultados, no hay alma ni piedad", avisaron desde el club

La noticia estalló con Sevilla y sus calles paralizadas por la Semana Santa. El Betis prescinde de un técnico, Chaparro, que llegó también a mitad de temporada, el curso pasado, e intentó hacer reaccionar a su equipo con canciones en el vestuario y discursos encendidos.

Nogués conoció su nuevo cargo anoche a través de la dirección deportiva del equipo, y luego se reunió con Manuel Ruíz de Lopera, el propietario del club, que ha visto pasar por el banquillo a 23 entrenadores en los 17 años que lleva al frente del Betis, ahora presidido por Luis León. "Estoy tranquilo, contento e ilusionado por lo que va a venir. Agradezco la confianza que el club ha depositado en mí para llevar a cabo un proyecto tan ilusionante", dijo Nogués en la Cadena Ser. "Voy con mucha ilusión, cargado de energía positiva y animado para salvar la categoría. Ahora, a trabajar mucho para sacar esto adelante. Le he prometido a Don Manuel [Lopera] que no voy a fallar. Este proyecto es muy grande. Creo en el trabajo y en la intensidad. Vengo con toda la ilusión del mundo para hacer buena esta plantilla, que creo que es excelente. Está plantilla no puede estar donde está. Es equilibrada y tiene muy buenos futbolistas".

La destitución de Chaparro era algo que sobrevolaba por Heliópolis. Tarde o temprano tenía que llegar. Y el técnico era más consciente que nadie de su delicada situación. Se llevaba más de un mes hablando sobre la conveniencia de su continuidad en el banquillo del Betis. Tras el empate del sábado ante el Numancia (3-3), se daba por descontado que al día siguiente el técnico sevillano haría las maletas y se marcharía de la entidad verdiblanca. Pero Manuel Ruíz de Lopera, consejero delegado y máximo accionista del club, prefirió pasar el domingo viendo las procesiones de Semana Santa, lo que retrasó la decisión hasta ayer.

"Cuando no hay resultados, no hay alma ni piedad". La frase que Manolo Castaño, consejero del club, lanzaba al aire ayer a la tarde presagiaba lo que iba a suceder horas más tarde. A Chaparro no le ha valido con insistir una y otra vez en que tenía fuerzas para revertir la caída en picado del Betis, incapaz de levantar cabeza. Antes del encuentro ante el cuadro soriano, el ya ex entrenador verdiblanco quiso mostrarse optimista: "Si no tenemos el resultado esperado, aún queda Liga". En eso tenía razón. Quedan nueve jornadas. Pero él las tendrá que ver desde casa.