_
_
_
_
_

El Puerto de Vigo propone ganar al mar unos 170.000 metros cuadrados

El hotel de Nouvel frente a la ría se convertirá en una torre administra tiva

María Fernández

Cuando llegó al Puerto como presidente, Jesús Paz heredó un encargo envenenado de su predecesor, el hoy alcalde Abel Caballero. Debía conjugar el grandilocuente proyecto encargado al arquitecto Nouvel con una planificación portuaria racional y ordenada que nadie se había tomado muy en serio en los últimos 13 años. El resultado se resume en dos documentos que tendrá sobre la mesa quien lo releve en el cargo y que inician ahora largos trámites administrativos.

La propuesta se centra en ganar línea de atraque y calado convirtiendo actuales escolleras en muelles y creando otros desde cero, pero no renuncia a importantes rellenos sobre la ría. Serán, sumados, aproximadamente 170.000 metros cuadrados en varios puntos, desde Bouzas a Punta Chapelisa, en Rande. "No es una patata caliente ni son proyectos con nombre y apellidos", se defendió Paz al inicio de la exposición. Y esos proyectos combinan el esperado plan de usos portuarios, que servirá para eliminar de primera línea a empresas cuya actividad no tiene nada que ver con el Puerto, con el proyecto para ganar 1.650 metros lineales de atraque. Lo último se hará con la ampliación del muelle de transatlánticos, la transformación de la escollera de A Laxe y la prolongación del relleno de Bouzas en una rampa hacia el interior de la ría. Al mar se ganarán 77.000 metros en el muelle del Arenal, 45.000 metros en el área central, 25.000 en O Berbés y unos 20.000 en Rande.

La intención es aumentar en 1.650 metros la línea de atraque

A cambio de este desarrollo, el Puerto diseña varios espacios abiertos a todos los ciudadanos. El primero está a las puertas de la bahía, en Bouzas, que extiende el paseo actual a toda la cara exterior de la terminal. El Plan Nouvel se reduce, aunque mantiene sus elementos esenciales. Al lado de la actual estación marítima se construirá un balneario de agua salada muy cerca de otro ornamento: el jardín de las mareas. El monolito del extremo mantiene su altura, 116 metros, pero reduce su volumen, con 800 metros de planta. Y no será un hotel, se dedicará a usos administrativos y tendrá una cafetería en su parte superiror. De ahí saldrá una pasarela que conectará con el eje de la calle Colón. Las plazas de atraque que soportan parte del coste pasan a la mitad: 800 amarres, que aún así son el doble de los actuales.

El Puerto de Vigo también suelta lastre en otras zonas de la ría. Deja de tener bajo su tutela 11 kilómetros de costa, principalmente en el término de Vilaboa, así como todas las bateas. Tampoco habrá línea de atraque en el antiguo cargadero de mineral, en el interior de Rande. En resumen, es, para el presidente portuario, "una planificación con sentido común y sin sesgo político".

Terminal de Bouzas ganada al mar en Vigo.
Terminal de Bouzas ganada al mar en Vigo.LALO R. VILLAR
Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

María Fernández
Redactora del diario EL PAÍS desde 2008. Ha trabajado en la delegación de Galicia, en Nacional y actualmente en la sección de Economía, dentro del suplemento NEGOCIOS. Ha sido durante cinco años profesora de narrativas digitales del Máster que imparte el periódico en colaboración con la UAM y tiene formación de posgrado en economía.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_