La impaciente Carlota Ciganda
La golfista, primera 'amateur' española que juega en el circuito profesional de EE UU
Tiene 18 años, en enero llegó a Estados Unidos y en apenas dos meses ha derribado una barrera histórica en el golf español. La navarra Carlota Ciganda se convirtió el pasado jueves en la primera jugadora española (en categoría masculina y femenina) que compite en un torneo del circuito profesional norteamericano siendo aún aficionada. En el LPGA Internacional de Phoenix, Carlota logró lo que ninguno de sus ilustres predecesores en el golf nacional se apuntó: codearse con las grandes como principiante.
Su entrenador en la Universidad de Arizona, con la que juega la Liga universitaria, la inscribió en un torneo amateur en el que Carlota podía participar por su condición de campeona de Europa. Con la sorpresa de que la recién llegada pasó por encima de todas sus rivales y obtuvo el billete para el torneo de las mayores.
"Una experiencia única", según Ciganda, pese a que en Phoenix probó la dureza del circuito profesional y no pasó el corte. "He aprendido de las mejores y no tenía ninguna presión", añade. Derribado el muro, otra canterana española en Estados Unidos, Azahara Muñoz, número dos mundial amateur, tomará el relevo esta semana en el también profesional Nabisco Invitational de California.
Pese al éxito tan pronto, los récords y haber sido segunda ya en dos torneos universitarios, Carlota tiene prisa por crecer y se queja cuando habla por teléfono con su padre, Jesús, porque todavía no ha ganado nada. "Es que, papá...". "Pero ¿qué te crees? Llevas mes y medio, estás entre las cuatro mejores, vas a un torneo profesional cuando hay jugadoras que no lo consiguen en cuatro años", le responde Jesús. "Es muy competitiva. En Navidad jugamos al frontenis y me machaca, y eso que yo tengo títulos en pelota. A los Ciganda siempre nos ha encantado el deporte", comenta su padre.
El tío de Carlota, José Ángel Cuco Ciganda, jugó en el Ahtletic y Osasuna. Carlota unió golf y fútbol-sala hasta los diez años. Desde los cinco jugaba con su padre en el campo de golf de Ulzama, a cuatro kilómetros de Larrainzar, donde vivía. A los 12 la vio por primera vez Marta Figueras-Dotti, ahora entrenadora de los equipos nacionales y la única golfista española en ganar en el circuito norteamericano (el Open de Hawai en 1994). "Siempre ha tenido una facilidad innata, una creatividad e imaginación que se han perdido en este deporte. Desarrolla golpes que un profesor no le enseña", cuenta Marta; "siempre me ha sorprendido su pegada y su actitud en el campo, siempre se divierte. Tendrá un impacto bestial en Estados Unidos".
Aunque echa de menos a su entrenador de toda la vida, Rogelio, Carlota está en su salsa en Arizona. "Le encanta competir, disfruta con ello. Otras notan la presión, se tensan. Ella, no. Tiene una visión especial de los golpes. Juega con la confianza de saber que, aunque haga un mal hoyo, luego se recupera sin problemas", comenta Mabel Pascual, directora deportiva de la federación.
Carlota, campeona en todas las categorías inferiores en España, vencedora del British en 2007 y del Europeo aficionado en 2004 y 2008, sueña con emular el éxito lejanísimo de Figueras-Dotti en 1994 en el circuito norteamericano. ¿Por qué tanto tiempo sin triunfos? "Porque no ha habido el atrevimiento para salir de España y competir allí", razona la ex golfista. Hasta la impaciente Carlota Ciganda.
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