Declaran ante el juez cuatro guardias civiles del 'caso Baena'

El Juzgado de Primera Instancia de Baena (Córdoba) trató de aclarar ayer los términos de la investigación sobre las presuntas facturas falsas del Ayuntamiento, por el que hay cinco imputados, entre ellos dos trabajadores municipales. A instancia de las partes, declararon los cuatro guardias civiles que intervinieron en la investigación; el empresario que denunció el caso (también imputado y que terminó retractándose de su denuncia, al afirmar que la hizo bajo presión); la contable de su empresa; el hermano del denunciante y el primer abogado de éste.

La intención del magistrado es aclarar las circunstancias en las que comenzó la investigación y cómo se tomó la primera declaración al empresario denunciante, Jesús Gómez, ya que luego se retractó y denunció coacciones.

Ésta es la versión que de nuevo repitió ayer ante el juez, según fuentes del caso. Su hermano también dijo haber sufrido presiones de unos desconocidos que, sin identificarse, le subieron a un coche y le inquirieron por la denuncia de Jesús Gómez.

Según las mismas fuentes, los guardias civiles habrían reconocido que la denuncia de Jesús Gómez le fue tomada en la vivienda de uno de los agentes. Uno de los agentes era el hermano de María Jesús Muñoz, edil de IU, que un mes antes había denunciado irregularidades urbanísticas en el Ayuntamiento. Este guardia está casado con la que era contable de la empresa de Gómez. La contable dijo que había detectado detalles extraños en facturas en 2005, de nuevo en abril de 2006 y por última vez en enero de 2007, pero no fue hasta julio cuando se lo dijo a su marido.