Madrazo dimite como líder de EB tras el batacazo electoral

Los pésimos resultados electorales de Ezker Batua (EB), que ha perdido más de la mitad de los votos y dos de sus tres escaños en el Parlamento vasco, han terminado por pasarle factura a sus dirigentes. Su coordinador y candidato a lehendakari, Javier Madrazo, ha puesto su cargo a disposición de la dirección, que el próximo lunes se pronunciará sobre su futuro. Lo mismo ha hecho el secretario de Organización, Serafín Llamas, quien ayer dio a conocer esta decisión leyendo un comunicado en una comparecencia en la que no admitió preguntas. Ambos asumen que los resultados "han sido, sin duda, decepcionantes". "No hemos cubierto las expectativas políticas de EB y no caben paños calientes para eludir la realidad. No caben excusas".

Madrazo ni siquiera ha sido capaz de retener su propio escaño por Vizcaya, lo que le deja en una situación muy precaria. Aunque ya había anunciado que estas elecciones serían las últimas a las que se iba a presentar como candidato -ésta era la quinta vez- y que en 2013 concluiría su vida política, puede que los acontecimientos se precipiten. Sin voz en el Parlamento y fuera del Gobierno vasco si el PSE lo asume, su posición resulta insostenible.

Aunque puede ocurrir que la presidencia de EB opte por relevarle lo antes posible, no es previsible que abandone la Consejería de Vivienda y Asuntos Sociales hasta que se efectúe el relevo en el Ejecutivo.

El líder de EB se ha sentido cómodo en un Ejecutivo marcado por el soberanismo hasta última hora, cuando la crisis era un hecho. Es el único consejero no abertzale y la coartada del lehendakari Ibarretxe para asegurar que su Gobierno, ahora en funciones, es de carácter plural.

El coordinador general de Izquierda Unida, Cayo Lara, consideró en Las Palmas que es Ezker Batua quien debe aceptar o no la decisión de Madrazo.