Touriño afirma que "no hay cacique que resista a la fuerza de los votos"

Emilio Pérez Touriño trasladó ayer su campaña por primera vez al interior de Galicia, pero mantuvo intacto su discurso. En Vilalba, capital de Terra Chá y el territorio emblemático de Manuel Fraga, el candidato socialista volvió a desgranar ante medio millar de personas las principales promesas de su programa, de la sanidad a la educación, pasando por las infraestructuras (obligada mención a la Autovía del Cantábrico) y la aplicación de la Ley de Dependencia. "Para un socialista, sentirse orgulloso de un país es sentirse orgulloso del sistema sanitario, de la educación, de las carreteras, de la atención a los mayores". Un país muy alejado, subrayó, de la Galicia "del ordeno y mando del PP".

"Ojalá el PP resuelva sus problemas, en tiempos de crisis hay que remar juntos"

Touriño volvió de nuevo a los valores para reclamar el voto y reprodujo, casi textualmente, las críticas que estos días dirige al PP, "el partido de los líos, en el que no hay sitio para las ideas". "Están a lo suyo. Ya me gustaría contar con ellos", exclamó emulando a Zapatero en A Coruña. "Ojalá resuelvan sus problemas, porque Galicia los necesita y en tiempos de crisis hace falta remar en la misma dirección".

Para subrayar la "fuerza extraordinaria de cambio" que representan los votos, el presidente no se resistió a la tentación de poner como ejemplo a Barack Obama y concluir que "no hay cacique que resista la fuerza democrática de los votos, aquí lo sabéis bien". "Os quiero pedir el voto para seguir ese camino en el que no cabe la Galicia de la resignación, el miedo y el pasado, donde no hay lugar para el desaliento". El voto de los que apoyaron a Zapatero y también el de los que no lo hicieron, añadió apelando por primera vez a los seguidores del PP. El mitin de Vilalba cerró la cuarta jornada de la campaña socialista, en la que el candidato a siguió sin aceptar preguntas de los periodistas que cada día cubren sus actividades como aspirante a la Presidencia.

El estrecho marcaje de los colaboradores del presidente volvió a ser visible en Vigo y en Pontevedra. El equipo de campaña de los socialistas gallegos escenificó primero una visita al mercado seguida de un paseo por una calle del barrio vigués de Teis (en el que la presencia estratégica de militantes y simpatizantes socialistas era más que evidente) y después un recorrido por el casco viejo pontevedrés. La planificación funcionó esta vez mejor que en Santiago, pero aun así, además de elogios y palabras de ánimo, Touriño escuchó reproches y respondió a críticas.

Por lo que respecta a los contenidos, las mujeres sustituyeron ayer a los jóvenes en el discurso de Touriño. La apelación de los primeros días a la movilización de la juventud dio paso a los llamamientos al voto femenino bajo la bandera de las políticas de igualdad. "Quiero comprometerme con la igualdad de oportunidades", y anunciar que la segunda etapa del cambio será la de la igualdad de salario entre hombres y mujeres, la de la apertura de escuelas infantiles para facilitar la conciliación de vida familiar y laboral y la de la puesta en marcha de mecanismos que eviten a las mujeres seguir asumiendo el cuidado de las personas dependientes.