DIARIO DE CAMPAÑA

- El centro de la batalla

Emilio Pérez Touriño (PSdeG) y Alberto Núñez Feijóo (PP) coincidieron ayer a la misma hora callejeando en Vigo, aunque en dos zonas distintas de la ciudad. Vigo es la urbe más populosa de Galicia, su corazón industrial, un lugar efervescente y creativo tanto en lo económico como en lo cultural. También es un caos en todos los órdenes, incluido el político. Con un comportamiento electoral difícilmente predecible, Vigo será el escenario de la principal batalla del 1-M. El PP tiene depositadas allí grandes esperanzas de arrebatar un escaño a los socialistas. Y la crisis está presente en esa ciudad más que en ningún otro sitio de Galicia: Citroën, la primera industria de la comunidad, está al borde de un expediente de regulación de empleo que podría llegar después de la cita con las urnas.

- La lengua en campaña

El candidato del BNG, Anxo Quintana, se reunió ayer en A Coruña con un grupo de intelectuales y gentes de la cultura. Quintana aprovechó la ocasión para defender las políticas de discriminación positiva del idioma gallego y para arremeter contra los que, según él, "fomentan el odio" contra esa lengua. La campaña ha deparado una situación insólita en Galicia: por primera vez en 28 años de autonomía, la discusión sobre la convivencia entre las dos lenguas se ha colado como uno de los grandes temas de debate electoral. El motivo, un giro radical en la política lingüística que el PP había defendido desde los tiempos de Alianza Popular. Feijóo ha hecho suyas las demandas del colectivo Galicia Bilingüe, que exige que una de las opciones educativas sea sólo en castellano. Eso obligaría a reformar la Ley de Normalización Lingüística, aprobada en 1983 con un Gobierno de AP. El Parlamento gallego la respaldó por unanimidad. Entre los diputados que la apoyaron estaba Rajoy.