Touriño pide a los jóvenes que voten porque "sin ellos nada será posible"
El presidente sostiene que Feijóo niega el derecho de los gallegos a un debate
"Os necesito. Sin vosotros nada será posible". Emilio Pérez Touriño tardó ayer apenas cinco minutos en emplazar a los jóvenes a revalidar el respaldo que dieron al cambio en las elecciones de 2005. Aproximadamente 150 de ellos acudieron ayer en el Hotel San Francisco de Santiago al primer acto de campaña del candidato socialista, organizado para subrayar la importancia que el PSdeG concede a la participación de las generaciones más jóvenes. Touriño, en tono distendido pero firme, dejó claro que necesita todos los votos "para no volver a épocas oscuras".
Hay que conseguir que "el cambio sea irreversible". "Galicia avanzó cuando los jóvenes empujaron" a través de su participación en las urnas y "parará el día en que los jóvenes dejen de empujar", advirtió. "Por eso quiero que volváis a tomar el futuro de Galicia en vuestras manos frente a quienes dicen que no merece la pena. A eso os convoco, desde el compromiso de corregir cada día los errores que se pueden cometer", cerró.
Un cartel de Xuventudes Socialistas mostraba, mejor que ninguna consigna, hasta qué punto el PSdeG va a tirar del pasado como reclamo para movilizar a sus votantes. Bajo el lema "¿Quieres que vuelvan?", el cartel muestra a Manuel Fraga manejando una marioneta de Alberto Núñez Feijóo.
El mismo hilo conductor ("Galicia decide el 1 de marzo si impulsa el cambio u opta por frenar y dar marcha atrás") fue el punto de partida de la conferencia que el presidente pronunció por la tarde en Club Faro de Vigo, en la que fue presentado por la conselleira de Política Territorial, María José Caride, también candidata del PSdeG por Pontevedra. "Nos jugamos la continuidad del esfuerzo de modernización y la posibilidad de ofrecer una respuesta unitaria a la crisis", subrayó.
En una jornada sin mítines ni actividad institucional, el candidato dedicó la mayor parte de su intervención de la tarde a repasar su gestión, desde lo que tiene que ver con la protección del territorio a las políticas sociales. Y pese a confesar su deseo de evitar la confrontación, no rehuyó las críticas al PP. Por "escurrir el bulto" en vez de "arrimar el hombro" frente a la crisis, por negar a los ciudadanos "el derecho" a la celebración de debates públicos entre los candidatos y por pretender "crear un conflicto lingüístico" donde no lo hay. "Rechazamos por igual las posturas que buscan segregar o dividir", dijo en alusión directa a Galicia Bilingüe, o "la imposición de una o de otra lengua", subrayó Touriño. "Defendemos la lengua propia de Galicia, pero nunca a costa de perjudicar al castellano", precisó.
Que Vigo puede ser decisiva en estas elecciones ya nadie lo duda. Así que el presidente no pasó por alto la oportunidad de repasar al detalle sus compromisos con la ciudad y, en un auditorio con una visible presencia de fuerzas vivas de la ciudad, así como de numerosos conselleiros y candidatos socialistas, aprovechó para hacer un anuncio que atribuyó a una "feliz casualidad": la "concesión a Vigo de la primera autopista del mar entre España y Francia, que tiene como cabecera el puerto de Vigo y va a unir una ruta estable al servicio de la competitividad que evite la deslocalización industrial".
El presidente, sin embargo, no precisó de qué forma se ha resuelto el problema planteado hace apenas una semana por Trasmediterránea, la empresa que opta al concurso para establecer la línea entre Vigo y el puerto francés de Le Havre, que no estaba dispuesta a aceptar la concesión si no se modificaban las condiciones establecidas.
Trasmediterránea cree que no puede cumplir las condiciones iniciales porque la crisis ha provocado una dura caída de la producción de Citroën en Vigo.
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