Humor en crisis
Jácara Teatro lleva unos 30 años en escena ofreciendo musicales según un entendimiento metagenérico del asunto: el musical serviría para todo, como vehículo. Ahora llegan al Talía con Por culpa de Yoko, otro musical cuyo título, y algo más, supone una irónica referencia a la idea un tanto disparatada de que la figura de Yoko Ono resultó clave en los problemas de John Lennon con sus compañeros de The Beatles, ya que a fin de cuentas el pobre Lennon tampoco era un calzonazos simplemente enamorado.
Esa referencia se concreta en algo de apariencia muy ajena a ella: cuatro mujeres trabajadoras, del sector del calzado, se encierran en su fábrica para que les paguen los salarios que les deben o las despidan a cambio del subsidio. La situación de origen es un pretexto para que las protagonistas desgranen, entre canción y canción, aspectos más o menos vitales de su existencia. Cada una de las cuatro expone la suya: una es optimista, la otra tiene que mantener a su hija, la otra es lesbiana, etc. Un cierto aunque tópico panorama de actualidad al hilo de la crisis, que las actrices sacan adelante entre bailes y canciones y que Mercè Vila dirige con un pulso propio y cómplice. Eso, y actrices potentes en un trabajo quizás demasiado subrayado.
POR CULPA DE YOKO
De Paco Sanguino, por Jácara Teatro. Intérpretes, Gloria Sirvent, Inma Ortega, Mila García, Dolores Faraco. Vestuario, Laura García. Iluminación, Alex Aviñoa. Coreografía, Inma Ortega. Banda sonora, Richard Cano. Música, Mendes-López, Juan Luis Mira, Margot Cortés. Dirección musical, Ovidio López. Dirección, Mercè Vila. Teatro Talía. Valencia.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.