El Recreativo se toma un respiro

El Recreativo respira algo más aliviado. El equipo de Lucas Alcaraz abandona los puestos de descenso después de un encuentro en el que Riesgo, su guardameta, consiguió detener dos penaltis a un Numancia que nunca estuvo convencido de sí mismo.

El estado actual de los dos equipos hace que la mayoría de sus posibilidades dependa de los descuidos del rival. Así le ocurrió al Recreativo, con una inteligencia suprema para aprovecharse del nerviosismo de un Numancia cuyas prestaciones son más bajas cuando juega fuera de su campo.

Sin mucha claridad, pero a base de determinación, el Recreativo empezó a arrinconar al Numancia. Sin embargo, una aparición solitaria de Goiria concluyó en penalti para el equipo de Kresic. Enfrente, Riesgo y Barkero, dos productos de Zubieta con escasa fortuna en la Real Sociedad. Barkero, que apenas había entrado en contacto con la pelota, lanzó fatal. El rechace de Riesgo lo recogió el propio Barkero, que lo mandó fuera con la pierna floja, la diestra.

No tardó el Recreativo en agrandar la herida del Numancia. Dos minutos después, Javi Fuego, con un derechazo desde fuera del área, le puso en franquía.

De ahí hasta el descanso el equipo de Alcaraz manejó a su gusto el ritmo del encuentro, aunque persistiera en su poca imaginación a la hora de crear oportunidades.

La segunda bofetada se la llevó el Numancia a los 13 segundos de iniciarse la segunda mitad, cuando Camuñas cerró una precisa incursión de Adrián Colunga, el núcleo ofensivo de su equipo.

Para rematar el desastre, Riesgo volvió a detener otro penalti, en esta ocasión a Brit. El Recreativo se dejó llevar e incluso consiguió otro gol. El tanto de Brit en el descuento quedó en una anécdota.