La estrategia es decisiva

Amigo de Ronald Koeman, Pep Guardiola aprendió que las jugadas de estrategia sirven para ganar los partidos más ásperos, aquéllos en que no hay manera de sorprender al contrario a partir del ataque estático, como ayer en el Nuevo Colombino. El paso por el calcio, un fútbol en el que priman las llamadas jugadas episódicas, y su temporada como técnico en la Tercera División, categoría en la que la mayoría de los equipos resuelven los encuentros en un libre directo o un córner, ayudaron al entrenador a perseverar en las acciones a balón parado, una suerte históricamente muy despreciada, por otra parte, en el Barcelona. Así que Guardiola no sólo entrena la estrategia propia, sino que dispone de dos técnicos que graban los partidos de sus adversarios para conocer los puntos débiles. No extrañó, por tanto, que ayer se felicitara con su ayudante Tito Vilanova cuando Messi marcó el gol que desatascaba el partido y situaba a su equipo como líder en solitario de la Liga.

Xavi tocó en corto para Messi, que se había salido de la barrera en la falta, y el argentino cruzó el balón a la red con la zurda tras un control fácil por el espacio ganado en una maniobra que sorprendió al Recreativo. El argentino, que se tocó repetidamente la cabeza para resaltar la acción como si obedeciera a un código, celebró con un tanto decisivo su quinto aniversario desde que debutó en el Barcelona. "Llevábamos tiempo ensayando la jugada", coincidieron todos. "Ya la practicaba en el Barça B", precisó Piqué. "El mérito es de Xavi y Messi porque la ejecutaron muy bien", terció Guardiola.

Messi resuelve a balón parado y cuando está en juego, convertido en el futbolista estrella de un plantel que extraña especialmente a Iniesta, no sólo por la profundidad que le da al juego sino porque no tiene sustituto cuando actúa de extremo izquierdo. Ayer le sustituyó Henry y al francés le cuesta viajar a la misma velocidad que Eto'o y Messi y rematar con tino a la portería. Aunque le faltó suerte en un disparo a la madera, Henry funcionó mejor como acompañante: suyo fue el centro que provocó el gol definitivo de Keita. Henry es un jugador que se mueve a gusto en el contragolpe y necesita campo, de manera que su mejor versión apareció después de que Messi marcara las diferencias con un gol ensayado.