Bojan se integra con goles
"Se estaba apartando del grupo, los tantos le vendrán bien para sentirse importante", reconocen en el Barcelona
Puestos a encontrarle un grano a la gestión de Guardiola, se convino que no contaba con Bojan. "El único problema que tiene Bojan en este equipo es que decido yo y como entrenador aún no he creído oportuno hacerle jugar de titular", explicó el entrenador, que se hartó de advertir que no, que contaba con el delantero, y lo razonó: "Juega casi siempre". Mientras, el vestuario, cuando miraba al Petibó -así le conocen los compañeros, afrancesando el tono- lo hacía preocupado por razones que referían a su aislamiento. "Parecía sentirse apartado, pero se apartaba solo", explicó ayer uno de los veteranos del equipo al regreso de Basilea. En el St. Jacob Park, Bojan compareció de titular por vez primera este curso y marcó dos goles en el 0-5 que le servirán, dicen sus compañeros, para sentirse más cerca del grupo.
"No es fácil crecer en este vestuario, debe tener paciencia", le aconseja Iniesta
"Me alegro mucho por él, necesitaba los goles", reconoció Messi. "Necesitaba sentirse importante", dicen otros. Bojan habla más en el campo que en el vestuario, donde parece inseparable de Piqué, una suerte de hermano mayor. El año pasado, un desastre de temporada que a él no le salpicó ni una gota del fracaso, estaba más solo. Ahí nació la creencia de que los compañeros le boicoteaban por celos. "Es cierto que la afición pitaba a Gio y a él se lo perdonaba todo", recuerdan en los despachos. En su primer año, Bojan marcó 12 goles y participó en 48 partidos.
"Debe asumir el rol que le toca", explican desde el cuerpo técnico, que se rebela contra quien insinúa que Guardiola no confía en él. La estadística es demoledora comparada con la del curso pasado y desarma esa teoría: hace un año, en siete jornadas de Liga y tres de Champions, Bojan había jugado 34 minutos. No fue titular hasta el 21 de octubre de 2007, en Vila-real, en la octava jornada de Liga. Anteayer, fue titular por primera vez, pero ya llevaba jugados 136 minutos, cuatro veces más que el año anterior. Sumados los 90 minutos jugados contra el Basilea, resulta que Guardiola ha usado seis veces más a Bojan que Rijkaard en los mismos partidos. Unos datos que no atienden a las sensaciones que ha venido transmitiendo el ojito derecho de la hinchada.
A los 18 años, Bojan carece de peso en el vestuario y está lejos de tener status de crack, ni entre los compañeros ni tampoco a ojos de los entrenadores. Cuestión de edad, de carácter, y también, razones tácticas. Bojan, especialista del gol, pelea contra Eto'o, Henry y hasta con Messi por el puesto de delantero centro. Pero con desventaja: éstos finalizan y "también aprietan", señalan en el cuerpo técnico. Bojan, a diferencia de los otros dos jóvenes de la plantilla, Busquets y Víctor Sánchez, no tuvo a Guardiola de entrenador el curso pasado. "Pep le está descubriendo", reconocen en el Barcelona.
"No es fácil crecer en este vestuario, debe tener paciencia", aconseja Iniesta, que como canterano pasó por un proceso semejante hace cuatro años, parecido al que afrontó Xavi cuando asomó la cabeza en el primer equipo y todavía jugaba Guardiola. "En Bojan incide una cuestión de carácter. Está súper protegido", reconocen en los despachos, señalando que no ha pasado por La Masia y siempre ha vivido con sus padres. A los 17 años, Piqué vivía solo en Manchester. "No hay más que ver a uno y a otro", resume un veterano.
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