El candidato de Carod, elegido presidente de ERC en Barcelona

El poder de Joan Puigcercós al frente de Esquerra Republicana (ERC) se agrietó ayer un poco más tras las elecciones a la presidencia de la Federación de Barcelona que ganó el candidato de su histórico adversario, Josep Lluís Carod Rovira, ex líder de la formación. Xavier Amorós no sólo revalidó su puesto en las urnas sino que Rut Carandell, la candidata del sector crítico Reagrupament Independentista quedó segunda, por delante del aspirante apadrinado por la actual dirección. Barcelona lleva camino de convertirse en un muro infranqueable para las aspiraciones de Puigcercós de controlar cada palmo territorial de Esquerra Republicana.

Carandell queda segunda y Eduardo se retira por un incidente con un SMS

Los resultados provisionales que se conocieron pasadas las 23 horas de ayer -una hora después del cierre de las urnas- otorgaban a Oriol Amorós el 46% de los votos, seguido de Rut Carandell con el 30% y de Xavier Florensa, con el 24%. La participación rozó el 63%. Hoy Amorós someterá a votación, en el congreso de los republicanos en Barcelona, la composición de su ejecutiva. Si sus llamamientos a la unidad, reiterados durante esta semana, eran sinceros, Amorós incorporaría a militantes del sector crítico en la dirección local.

Amorós partía como favorito pues Barcelona siempre ha sido una fortaleza de los carodistas, encabezados por el alcaldable Jordi Portabella. La incógnita radicaba en quién quedaba segundo. A tenor del número de avales que presentaron el resto de candidatos, el edil Xavier Florensa hubiera tenido que quedar por detrás de Amorós. Pero Rut Carandell dio el sorpasso al llevarse el 30% de los votos y desplazar a Florensa al último puesto. Si la dirección actual creía herido al sector crítico de Reagrupament Independentista, del ex consejero Joan Carretero y del parlamentario Uriel Bertran, los comicios de Barcelona han demostrado el error de tal teoría. Así que Reagrupament Independentista sacará pecho mañana domingo en el congreso regional de Lleida, en donde se han aliado con los carodistas para derrotar al candidato oficial.

Los de ayer tenían que ser unos comicios tranquilos con cuatro candidatos en liza, pero un SMS -mensaje de teléfono móvil- escrito en tono desafiante, empañó la jornada electoral. Uno de los aspirantes, Jordi Eduardo, se retiró a última hora de esta carrera, y pidió el voto en blanco, después de conocerse que había presionado a los concejales de Deportes de Esplugues de Llobregat y Rubí para que suspendieran un partido de fútbol sala femenino y permitir así que las jugadoras participaran en el equipo de la selección catalana.

Eduardo, coordinador territorial institucional de la Secretaría del Deporte, presentó ayer la renuncia a su cargo al admitir que el tono del texto era "inadecuado". La Generalitat, con toda seguridad, aceptará su dimisión la próxima semana, informaron fuentes de la Vicepresidencia.