Puyal afirma que el catalán sufre "violencia simbólica"
En 1976, Joaquim Maria Puyal fue el primero en aventurarse a relatar los partidos del Barça en catalán desde Ràdio Barcelona. De esta forma, popularizó la lengua en el campo del periodismo deportivo y ayer recibió por esa labor el Premio Canigó que otorga la Universitat Catalana d'Estiu (UCE), que ayer dedicó sus actos centrales a debatir sobre la situación del catalán en los medios de comunicación. Pero Puyal estaba lejos de mostrarse satisfecho. Recalcó que el catalán sigue sufriendo una "violencia simbólica" cuando, en una situación de aparente normalidad y apertura, se niega en muchos medios la existencia de un "universo simbólico catalán".
El periodista aseguró que siente "fracaso, incapacidad y absoluta impotencia" al no haber podido impulsar un grupo mediático privado paralelo al sistema público de radiotelevisión catalana para corregir esta situación. Cree que han faltado para eso las voluntades política y económica necesarias, aunque no tira la toalla: Puyal se mostró dispuesto a "liderar" un grupo así si se crea. Pero también dejó claro que lo primero son los receptores. Antoni Bassas, que también estaba presente en el homenaje, resumió así la máxima de Puyal: "Los oyentes no nos tienen que escuchar porque hacemos nuestro trabajo en catalán, sino porque lo hacemos bien".
Bassas se refirió también a la famosa "costra nacionalista" que supuestamente tenían, según el diputado socialista Joan Ferran algunos periodistas de la Corporación Catalana de Medios Audiovisuales (CCMA), subrayó: "Para Puyal ha habido siempre dos costras que siempre ha querido arrancar: la de la mediocridad y la del sectarismo". Bassas, que dejó de dirigir las mañanas de Catalunya Ràdio hace un mes, sigue manteniendo oculto su futuro profesional, aunque asegura que la primera opción que tiene es quedarse en la CCMA.
Calidad
Por la tarde le tocó el turno a la directora de TVC, Mònica Terribas, que aseguró que la única forma de "hacer que la sociedad catalana mire el mundo" por TV-3 es ofrecer un producto muy competitivo y que dé el servicio adecuado. Para lograrlo, reclamó los medios suficientes. Lo hizo con rotundidad y ante el que tiene las llaves de la hucha: el secretario de Cultura de la Generalitat, Eduard Voltas.
Voltas recalcó el hecho de que el consumo en catalán es muy bajo en todos los campos culturales. Este independentista declarado parece tener muy claro, sin embargo, cómo mejorar la situación. Y su idea coincide con las del resto de personas que hablaron ayer en la UCE: "Cuando no tienes Estado ni la mayoría demográfica sólo te queda seducir a la audiencia".
