Michael Turner, autor y editor de cómic

Michael Turner era más que un dibujante de provocadoras superheroínas en el fantástico universo del cómic, como la inocente y todopoderosa Fathom, o la voluptuosa detective Witchblade. Era todo un artista. Su trabajo no podía pasar inadvertido. Padecía cáncer de huesos desde hace ocho años. Una complicación en el tratamiento acabó con su vida el pasado 27 de junio, en un hospital de Santa Mónica (California). Tenía 37 años.

La revista Wizard le dedicó una edición especial antes de morir. Como señala Ale Garza, dibujante de Fathom, Turner era un icono de la industria del cómic. Pocos lograron tanto como él en tan poco tiempo. Con apenas cinco páginas de su trabajo, fue descubierto en la convención Comic-Con en 1993 por Marc Silvestre. No tardó mucho en convertirse en una figura.

Turner nació en abril de 1971 en Crossville (Tennessee). Empezó a estudiar medicina en la universidad del Estado que le vio nacer. Antes de graduarse, se trasladó a Aspen (Colorado), y después a San Diego (California), donde empezó a desarrollar su interés por el cómic. Silvestre le fichó para trabajar con su equipo de artistas en Top Cow. Los dos crearon Witchblade, y en el verano de 1998 debutaría con Fathom, una bióloga marina con aspecto de modelo.

La enfermedad no pudo con su pasión por el cómic. El cáncer le fue diagnosticado por primera vez en la primavera de 2000. Dos años después crearía su propia compañía, Aspen MLT (que responde a sus iniciales). Entre sus últimos trabajos destaca la adaptación al cómic de la serie de televisión Héroes, o varias portadas de la serie Justice League of America, de la editorial DC Comics. Para Marvel Comics hizo una versión especial de la primera portada de la serie Hulk y del número 500 de la serie X-men, que salía a la venta la semana pasada.

También para Marvel hizo las portadas de Civil War, Superman/Batman y The Flash. Como señala Andrew Farago, del Cartoon Art Museum en San Francisco, Michael Turner era un dibujante de muy alto nivel y de gran influencia, por eso las editoras de cómic le demandaban para sus portadas. Ryan Liebowitz, de Golden Apple Comics en Los Ángeles, dice que su nombre es sinónimo de "ediciones especiales" de gran valor para los coleccionistas.